“And I’m feeling so Bohemian like you, yeah. I like you, and I feel wahoo, wooo, wohoo hoo hoo”. Ese coro expresivo, causante de curiosidad, con unos riffs rápidos motivados por los instrumentos seguidos por una voz particular parte del disco Thirteen Tales From Urban Bohemia de The Dandy Warhols, lanzando el 1 de agosto del 2000. Ellos son banda underground del círculo que presenta su propia identidad.
En el 2000, con un nuevo baterista, iniciaron la nueva etapa en este álbum que los llevaría definitivamente a las grandes ligas, les quiso dar vuelta a la música, dando una esencia para esos años y destacándose por las diferentes temáticas, sonidos y potencia. Los temas tienen un tinte de rock junto a lo alternativo. Es uno de los mejores discos que posee esta banda, ya sea por el sonido junto a la puesta en escena.
Godless abre este álbum con una guitarra acústica dinámica, combinada con un poco de viento. Líricamente, Courtney Taylor-Taylor, el vocalista abre las bases del pensamiento para el resto del álbum. Es un inicio peculiar, extraño, pero con un estilo Warhols.
Le siguen con Mohammed, tema que posee esas melodías continuadas por la batería, trayendo una onda ligada a lo psicodélico jugando con las guitarras, al ritmo de una voz que crea un trance oscuro.
Neitzche, qué extraño. Las percusiones entran en potencia para crecer con un poco más de ruido pero un borde mucho más sombrío y ligeramente más rudo. Las capas de ruido se vuelven raras, poseen toques deliciosos que te hacen sentir como si estuvieras en un tipo de aturdimiento.
Country Leaver, tiene toques country, saliendo de la línea del disco. Expresan que no todo es la psicodelia y el rock, mostrando que pueden experimentar, pero de mala forma.
Horse Pills, por fin agarraron la fuerza. Está en el corazón de este álbum y es una historia, clara y concisa. Juegan con una voz más popera, insertándose en los teclados entrelazados con una coros entre la guitarra de Holmstrom.
Get Off, la salsa en su clave. Aquí es donde están unos riffs más rápidos, ligados un rock pegajoso. Es un tema que te hace cantar o bailar y disfrutar de las melodías. Una canción sobre sexo, drogas, rock n roll, que te deja llevar por las ondas musicales.
Las pasiones hormonales se calman en Sleep. Es el lado melancólico y más tranquilo del álbum, donde solo es una voz de Taylor-Taylor entrelazada por unas melodías en calma, expresando un sueño.
Cool Scene, una mezcla entre el pop, teclados y toques alternativos. La canción expresa dejar de lado los clichés. Aquí está la jugada más motivada con trompetas, pero sin dejar la onda Warhols.
Wooooho, woh. Bohemian Like You, el himno Warhols, conocido y cantando en todas sus tocatas. Es motivado, expresivo, jugado y prendido. Es una canción que deja todo lo malo para jugarse con diferentes ritmos y riffs. Este fue un éxito crítico y comercial para la banda.
Sigue con Shakin, que suena similar a Bohemian like you, pero el anterior deja una vara alta. Que no es del todo malo y además incluye algunos scratch de DJ, mostrando el lado experimental, con una percusión que juega con los riffs de guitarra.
Big Indian, el lado acústico que va a la par de las percusiones. La voz expresa cierto descanso, tristeza, dando a conocer su lado indie rock.
Finalmente termina con las armonías tristes, la resignación dulce y melancólica de The Gospel, es un cierre que transcurre como en el fin de un día de verano, aparentemente interminable.
Este es el disco donde la banda se destaca y causa cierta potencia. Demuestra que una banda puede ocupar diferentes estilos para crear su propio sello. Como recomendación, es un buen álbum para escabullirse en los chicos del Capitolio.
Escrito por: Feña