Mientras el mundo se cae a pedazos con el hype que ha mantenido Kanye West hoy de sí va a lanzar o no su álbum «Jesus is King», hemos buscado una reseña escrita para la época sobre ‘The Life of Pablo’ que nunca vio la luz. El denominado «álbum de la vida» por el propio West, mostraba una buena manera de resumir lo que significa Ye en cuestiones artísticas, culturales y por supuesto musicales. Acá se las compartimos.
La agonía y el éxtasis de una de las mentes más turbulentas y protagónicas que nos ha entregado el siglo XXI. Para bien o para mal, las locuras de un doctor tan o más excéntrico que Victor Frankenstein, han generado todo tipo de milagros y plagas, tanto para sus fans como detractores. Siendo una constante esa especie de egocentrismo extremo, que lo mantiene a un paso de sucumbir frente a las presiones artísticas y mercantiles, generadas en numerables ocasiones por su talento innato a la hora de crear polémicas. No hay mejor campaña publicitaria que abrir tu boca o twittear, un sin fin de opiniones concebidas, con el único deseo de expresar cosas. Todos fijarán instantáneamente la mirada en ti, y de algún modo en lo que estás haciendo. Y es que cuando todos prevemos su caída, termina por alzarse victorioso. The Life of Pablo es su historia, la cual si bien está lejos de finalizar, nos presenta la importancia de su figura por estos días.
El álbum es un testamento pensado para la posterioridad; como cada larga duración que ha publicado, juega con el concepto de movernos el piso, desde las latitudes más cercanas al mercado, hasta el Jesús personal que llevamos dentro. Por una parte está la importancia que ha planteado dentro de la industria musical, específicamente en el arte tras un trabajo discográfico, siendo la idea del “disco vivo” tan atractiva como caprichosa, reflejando las visiones que va teniendo con el tiempo de sus propias canciones, en cambios y actualizaciones de su streaming. Como un dlc constante de modificaciones, que solo Yeezy sabe porqué hace. Por otro lado, la filosofía más íntima genera un bombardeo constante de reflexiones tan burdas como esenciales, a la hora de entender al hombre tras ese alter ego, abriéndonos su vida, desde perspectivas tan irreconciliables como la razón y el inconsciente. Al final, un montón de pinceladas que se van abriendo camino, a través de un trabajo tan caóticamente bien presentado.
Si Ultralight Beam registra el ideal más espiritual de Kanye, con esos coros Gospel y la magia de Chance The Rapper, Famous nos trae de vuelta, con toda su verborrea habitual, al Mr. West más comercial y constantemente criticado. Un retrato vicioso de los tiempos actuales, que si bien vemos recogidos desde un collage incompleto pero inciso de canciones (Lowlights, Highlights o Father Stretch My Hands y su secuela), quedan completamente reducidos al lado de aparentes ataques de esquizofrenia hechos canción. Por este último carril circulan las menciones honrosas del álbum, partiendo por cortes como la circundante Feedback, pasando por la sátira bipolar de I Love Kanye, llegando finalmente a ese manjar para mentes como la de Tyler, The Creator llamado Freestyle 4. Una trilogía tan imperdible, dentro de las dimensiones más atractivas y novedosas del disco.
Si bien la importancia de un álbum como The Life of Pablo, parece ir sentada de la mano de los aspectos más revolucionarios, como lo fue la presentación y particular distribución, hay ciertas joyas que bien vale la pena mencionar. Dentro de todo el concepto, nos encontramos con canciones que emergen por sí mismas como es el caso de Real Friends, la cual cuenta con la participación de Ty Dolla $ign, siendo un moderador dentro de esa dura y profunda confesión de un Kanye mucho más sentimental. También contamos con Waves o Wolves, siendo ambas una muestra fundamental del buen uso que hace West de sus invitados y colaboradores, siendo el catalizador necesario para el funcionamiento desde la producción hasta la interpretación. Gota tras gota, cortes como la hipnótica 30 Hours se acercan más a la madurez, mientras que la herencia del Yeezus hace su aparición en temas como FML y Facts, la primera siendo un lamento apocalíptico, mientras que la segunda un incendiario ir y venir de locuras. Así y todo el No More Parties in L.A.(junto a Kendrick Lamar) y el afrodisiaco trance generado por Fade (con Ty Dolla $ign y Post Malone) se aseguran el lugar de ser ese combustible inagotable, de un disco que termina por dar sus golpes más certeros al final.
The Life of Pablo es una incongruencia de catálogos rescatados de todos sus trabajos anteriores, que terminan por entregarnos receta tras receta de mamotretos personales y poderosas confesiones. Un disco dramático, tan cercano y a la vez lejano, el cual podríamos denominar como el álbum más experimental firmado por Yeezus. Pues si bien, la gran mayoría de elementos aquí presentes perfectamente pueden ser atribuidos a jugadas anteriores, el nuevo orden instaurado es tan transgresor, como la parafernálica mente de un hombre atrapado entre sus devociones personales. Las promesas a estas alturas han sido totalmente violentadas, aunque la idea de que el registro nunca verá la luz en formato físico parece no negociable. Pero eso no es un impedimento para aquellos devotos siervos que han seguido su carrera. Es así como, en tiempos bíblicos y sagrados, la palabra de dios fue difundida, a través de manuscritos y clandestinidad. Un día después de su publicación, torrent se llenaba de archivos de lo nuevo de Kanye, así que quién sabe, tal vez la gente comience a crear sus propias copias piratas de Pablo.
Escrita por Felipe León
