Disco de la semana
Es sabida la importancia que posee el hip hop por estas tierras, siendo una tradición musical que ha sabido abrirse paso por fuera de las tendencias, siempre a tono con las corrientes más ligadas al boom bap, hardcore o lo latino. Sin embargo, no todos los proyectos se adaptan a estas escuelas, pues nombres como YCB (Young Cute Boys) se han encargado de abrir el campo, gracias a las poco convencionales influencias que utilizan en su música. ‘ÍDOLO DE NADIE’ es una prueba fehaciente de aquello.
Ya desde hace varios años que la agrupación viene cimentando lo que hoy materializan en este disco. Algo de esto vislumbraba ‘Del Tabo a París’, un trabajo que pese a sonar un tanto lejano a esta cara más reciente del proyecto, evidencia la buena química que sus integrantes mostraban desde ese importante hito.
Lo cierto es que YCB rechaza cualquier comodidad al momento de traducir sus ambiciones, en un extraño pero accesible cóctel de creatividad que no esconde sus ganas de ir siempre más allá.
Nada por sentado
Uno de los rasgos distintivos que florecen en ‘ÍDOLO DE NADIE’ guarda relación con la mesura con la que interactúan las partes involucradas, entregando un espacio más amplio al desarrollo vocal. Pero también a los beats, ya que en medio de las estructuras cultivadas desde lo experimental que se aprecian en el LP, se congregan momentos bastante diversos, los que de algún modo u otro logran construir un relato coherente, y sobre todo, fascinante.
En ese sentido, YCB funciona como un colectivo dispuesto a saciar su hambre creativa, capturando versatilidad desde rincones tan dispares, siempre guiados por lo que buscan transmitir. Por lo mismo, sus líricas a ratos abstractas, en otros conscientes, e incluso emocionales, conjugan un abanico de temáticas plenamente arraigadas a los estímulos que se puedan presentar en el camino. Porque la agrupación no da nada por sentado, evitando en todo momento caer en lugares comunes y redundantes.
Siempre inquietos.
El alma exploratoria de YCB
El rol fundamental que juega la producción de Skuid, conduce con protagonismo y solvencia este vehículo musical por las 11 canciones que presentan, como se puede percibir casi al final en » p l a y g r o u n d «. Pero ni de lejos es la única destacable en esta área, pues la arquitectura de la propuesta extravagante, profunda e impredecible de YCB esconde en su alma exploratoria, algunos de los más impactantes casos de cómo posicionar en la mezcla final los versos.
No por nada el inicio con «NEGOCIANDO», anuncia con lujo y detalle parte de los encantos que irán desarrollando en ‘ÍDOLO DE NADIE’. Seguida por dos bombazos duros como «W.A.M.» Y «BENJAM!N», que yacen siempre a tono con el pop rap y el hip hop experimental de la obra.
Por otro lado, «YANNICK CUEVAS» traduce con crudeza y verdad ciertos disgustos introspectivos, mientras que «dᴉɹʇ_ʅɐuoᴉsuǝɯᴉpɹǝʇuᴉ_oʇǝq_uɐʇᴉdɐɔ.wav» profesa un aura electrónica más propia del liquid drum & bass. Lo mejor de todo es que este cambio no provoca ningún quiebre narrativo, al contrario, le entrega un impulso más oscuro y clásico al resto del viaje, tal como ocurre en «INVISIBLE».
Todo dispuesto al gran remate que brinda la ya menciona da » p l a y g r o u n d » con Nakule & Andromeda y «SHY RAPPERS CLUB» feat Dj Dacel.
Intensa lucidez.
Escrito por Felipe León
Escucha ‘ÍDOLO DE NADIE’
Por YCB
Instagram
Fotos por @maneleigh
