2019 fue un asombroso año para la música, cerrando con gracia una década productiva en el que los cambios de paradigmas se acentuaron aún más en este año. Hubieron regresos esperados por años, consolidaciones merecidas, y debuts asombrosos que hicieron de este año uno que opta por el futuro, por la evolución y por la diversidad.
En Expectador nos abocamos profundamente a esos conceptos, por lo que damos un tratamiento a todos los géneros y sonidos por igual, así como también nos esforzamos en encontrar más allá de los nombres atendidos por la prensa. En esta lista encontrarán no sólo dichos nombres, sino también aquellos que se encuentran aún bajo el radar, aquellos que se gestan en distintos puntos de este vasto planeta, así como aquellos géneros que históricamente la crítica ha invisibilizado.
Creemos que para un mundo mejor, no hay daño alguno en reconocer lo distinto y aventurarse en esos amplios universos. Así, sin más preámbulos, los dejamos con nuestra selección de los mejores álbumes internacionales del 2019.
100. Floating Points – Crush
A estas alturas Sam Shepherd es una eminencia dentro de la electronica, siendo este «Crush» una obra que apunta por la reformulación estructural de un IDM que si bien mantiene ciertos atisbos bailables que se mantienen de manera sutil, son los experimentos a nivel rítmico –cortesía del ingrediente breakbeat– y de samples como producción que hacen de este álbum uno sumamente fascinante. La inmensidad evocada es tan infinita como la visión sin límites de Floating Points.- Jota
99. Harry Styles – Fine Line
Comenzando ya la lista, tenemos un artista que se rebeló del mainstream que lo sostuvo en su grupo pasado, pasando a ser –y gestarse– en una suerte de talismán, conllevando a terminar y modificar a el propio Harry Styles para finalizar en un artista hecho y derecho, poniendo en el tablero la musicalidad y generosidad, sacando el estilo dentro de su ser. Trastocando los sonidos del indie pop y sacando a relucir la versatilidad y semblanza en este hito llamado Fine Line.
El álbum es una suerte de madurez y sensibilidad, rasgando el canon estricto y proyectando una carrera solista que podría ser más que beneficiosa para la industria y para el propio Harry Styles, donde en Fine Line se siente a gusto y se ve la comodidad de su visión musical.- Hernán
98. WOS – CARAVANA
La importancia de WOS recae en un par de conceptos. Primero, hacer freestyle no es lo mismo que hacer canciones, algo a lo que el argentino sale al paso con puro talento y gancho elaborando canciones de crítica dura y con un buen sentido de lo que tiene que provocar una canción, equilibrando distintas formas del hip hop. Segundo, tiene un éxito tremendo en generar una noción popera del rap sin perder sustancia ni agresividad. Todo lo contrario, pareciera más afilado que nunca.- Jota
97. King Princess – Cheap Queen
Tal parece que King Princess está destinada a ser aquella voz que escuchan estas otras voces dentro de la música. Las fichas puestas por nombres como Mark Ronson, Harry Styles y hasta Fiona Apple, bastaron para que Straus dedicase a elaborar un perfecto producto revelador dentro del Pop, con una madurez y desplante impresionante, sacado precisamente de la mejor galería de producciones y visiones artísticas heredada por ella. Cheap Queen carga ya con ser un imprescindible para comprender la importancia y calidad de los productos más cercanos al Pop, y a la vez comunicados con la vanguardia.- Felipe
96. Kan Sano – Ghost Notes
Kan Sano, pianista y productor japonés reluce en su entrega de Ghost Notes con un eje particular, donde se entromete de lleno en un jazz/funk digno de admiración.
La sonoridad y atmósfera es sumamente seductora, orgánica en el sentido musical y en la ejecución. En su estética es sintética debido a los elementos y recursos que va utilizando en la fluidez del álbum –dando y demostrando sus dotes de productor–.
Ghost Notes basa su textura (estructura) y cadencia en el Jazz, la sincera voz que manifiesta, junto con una exquisita suavidad y Groove que nos condiciona a tenerlo presente dentro de los lanzamientos más importante del país nipón.- Hernán
95. Swans – leaving meaning.
Entre la paradoja que aborda Michael Gira con Swans en este leaving meaning., encontramos a un músico tratando de borrar cualquier indicio de crudeza previa para centrase de lleno en la dinámica de los detalles que disponen estas pasivas y hasta dulces composiciones. Entre la sutileza de una guitarra de corte más acústico, yace la vertiente menos saturada y más abierta a encontrar cada melodía, al filo de la simpleza y serenidad. Claro, con ese toque de malicia en medio.- Felipe
94. Lisel – Angels On The Slope
Bajo el radar este año nos maravillamos con Lisel y este tremendo trabajo debut que viene a hacer un cambio de tuercas bien particular al dream pop. «Angels On The Slope» nos deja un aporte inconmensurable en términos de samples y producción, destacando en particular como la cantante utiliza su voz para la misma música en varias ocasiones, generando capas de sonido y armonías exquisitas fruto de su virtuosismo inusitado en el arte de cantar. Así, nos entrega un álbum tan cálido como experimental.- Jota
93. clipping. – There Existed an Addiction to Blood
Inspirado en historias de terror, clipping. imbuye con su forma particular de rap una nueva concepción de lo podríamos conocer como horrorcore. «There Existed an Addiction to Blood» está muchísimo más concentrado en el ambiente generado, en donde la banda muestra excelsa lucidez a la hora de crear beats y melodías que al conjugarse terminan creando una obra única en dónde elementos como el noise, el math, la electronica y el soul son usados a su placer de maneras inimaginables, como la peor de las pesadillas.- Jota
92. Flying Lotus – Flamagra
Flying Lotus fluye a través de intensas llamaradas de sacudida espacial, densa y poco convencional en un acto oscuro como lo es Flamagra. La exploración narrativa que le ha llevado a indagar en los terrenos más audiovisuales, juega un rol importante en la elaboración de este disco que aborda sus ambiciones, con un juego de destrezas jazzisticas, elaboradas producciones y vertiginosas sacudidas ligadas a la más pura experimentación cortesía de un productor atípico y emocionante.- Felipe
91. Nilüfer Yanya – Miss Universe
Con esa característica voz profunda, Nilüfer Yanya nos entrega una pieza bastante particular del indie, siendo este «Miss Universe» un receptáculo de sonidos e influencias que se conjugan de las maneras más extrañas y fascinantes. Hablamos de no sólo indie rock –y sonidos hermanables como el garage– sino también el indie pop, art pop, jazz, e incluso soul. Así, la cantautora se hace un lugar con agresividad al demostrar no sólo versatilidad, sino una visión tan gigante y trabajada como la pasión depositada en cada una de sus piezas.- Jota
90. Girl Band – The Talkies
En medio de un espacio de directas coberturas a la contra cultura del Punk mismo, Girl Band fluye con un magnetismo especial para dar vid a a The Talkies, una especie de conversación entre sus miembros resultando una búsqueda fascinante sobre el ruido, la poesía beat y la re-definición de sus propios cimientos. Existe adrenalina, rabia y aquella explosiva manera de sacudirnos con tanto fervor, paciencia y construcción, resultando extraño y repleto de fortalezas.- Felipe
89. Iglooghost, BABii & Kai Whiston – XYZ
Este álbum colaborativo, además de dejar los nombres de Iglooghost, BABii y Kai Whiston como focos de atención para los tiempos venideros, reluce por las formas histriónicas de crear piezas de electronica únicas. El papel de BABii es clave en ello, al entablar una noción pop que se entremezcla muy bien con el trabajo en las perillas de parte de Iglooghost y Kai Whiston, logrando un álbum adictivo y vicioso de carácter fuerte y su impredictibilidad, sobre todo en cuanto al viaje.- Jota
88. Ithaca – The Language Of Injury
En uno de los debuts más feroces que nos tocó ver este año, Ithaca viene a deconstruir cualquier noción que tenemos del metal de la manera más agresiva posible –porque no estamos para sutilezas en estos tiempos de urgencia ante el machismo imperante en el género– siendo «The Language Of Injury» un disco peligroso y sumamente crítico. Claro, la cuestión no queda sólo ahí, sino que además la agrupación se encarga de darle un giro en 180º al metalcore, entregándole la experimentación e impredictibilidad que tanto necesitaba –apoyándose en el flujo emocional y musical del hardcore–. Un álbum realmente único.- Jota
87. Clairo – Immunity
Un esperado debut del año pasado, donde Clairo saca a relucir la mejor forma de combinar estilos pasados con actuales, dando gestión a un género plausible y generoso como lo es el bedroom pop.
Immunity deja en claro la estéril y pristina suavidad del lo-fi junto con esas mezclas y sonoridades/armonías sintéticas, balanceando la voz orgánica y sincera. Immunity tiene mucho potencial y energía para el despegar de la carrera de Clairo y, sin duda, que queda dentro de lo mejor del pasado año.- Hernán
86. Shura – forevher
La explanada de música sintética que Shura nos acerca con tanta personalidad y profundidad, bebe directamente de la nostalgia que evoca el sonido del piano, dentro de ese karma Soul que la compositora decide explorara a tal punto de revelarnos la grandeza de su alcance. Que buen paso se siente forevher, en medio de tantas alternativas a su haber, gestando un sonido brillante –de ensueño– que envuelve sus ideas en pos de abordar las dificultades personales de una relación a distancia.- Felipe
85. CHAI – PUNK
Aterrizando en ese eufórico y enérgico Punk de las Japonesas CHAI, nos enteramos de cómo funcionan las cosas para una banda, dispuesta a borrar cualquier indicio de estereotipo musical, proponiendo más que nada su forma de ver las cosas, la cual se desliza con facilidad por todo tipo de géneros y estados anímicos. Así este álbum carece de cualquier molde, abarcando tantas cosas en tan buenas canciones, que se nos hace irresistible no sumergirse una y otra vez en lo cautivante de su obra.- Felipe
84. Mannequin Pussy – Patience
Patience es una clara expresión de exteriorizar el dolor tras una ruptura. Las líricas bien al hueso y sometiendo el martirio que es vivir aquello, mientras desenvuelve un vendaval de emociones que mantienen la fuerza del álbum. Patience demuestra ser un sonido garage/punk con canciones cortas e incendiarias, rock a la vena a la antigua y una manera de manifestar ese sentimiento con un desgarro, dando la gestación de un álbum único e irrepetible dentro del año, considerado como una muestra de viveza y pizca de rock que faltaba ver. – Hernán
83. BIG|BRAVE – A Gaze Among Them
«A Gaze Among Them» es uno de esos trabajos que nos sorprendieron de sobremanera durante este año, y el porqué es la visión excelsa de BIG|BRAVE que generó un álbum único no sólo dentro del drone y el metal en general, sino dentro de la música misma. Entregando un minimalismo concentrado en patrones, la banda canadiense utiliza los preceptos rupturistas del post-metal para aterrizar y humanizar un sonido tan ominoso y denso como lo es el drone, fórmula que llega a cierta perfección cuando la voz honesta de Robin Wattie entra al juego.- Jota
82. Injury Reserve – Injury Reserve
El trio americano de Hip-Hop, en su definitivo debut, demuestra que puede trastornar la realidad a base de creatividad. Injury Reserve demuele con agresividad y acidez la tranquilidad sonora, el rap agresivo es cómplice de experimentos sonoros, con la intromisión de esos bangers que retumban en los oídos. Injury Reserve nos deja con la sordidez, la frescura y la intención, que da traspié a generar ese cambio generacional en el Rap contemporáneo, dejando atrás la época gloriosa del Rap callejero, para dar paso a la experimentación. Traspasar la frontera es difícil, pero con esta premisa, da pie a un interesante futuro en este género.- Hernán
81. Aldous Harding – Designer 
La compositora neozelandesa toma los elementos del folk para proyectar una íntima introspección, manifestada en una interpretación tremendamente pura y clásica, donde saca a relucir su mayor virtud: la voz. Aldous Harding en Designer nos demostró la capacidad de mantener viva la esencia del folk de cantautor, género que nos emocionó en el pasado año y que mantiene la ligereza y la melancolía. Aldous demostró que es posible generar un buen álbum en base a lo orgánico y sincero.- Hernán
80. Foals – Everything Not Saved Will Be Lost Part 1
Una banda que ha dejado raíces esta década logra alcanzar un sello distintivo en el sonido, dejando de lado el frenesí para adentrarse en el disco más maduro que han sacado hasta el momento. En este caso, Everything Not Saved Will Be Lost Part 1, la primera entrega de su disco doble del pasado año, Foals concentra los matices y explora un sonido aterrizado, aún con el alma frenética que conlleva a demostrar que el ritmo es el motor de la música. Las texturas y pragmatismo de este álbum es la razón por la cual es incluido en nuestra lista.- Hernán
79. Kelsey Lu – BLOOD
La cellista ha sido una artista presente dentro de la década de manera silenciosa –pero contundente–, habiendo aportado con su talento a nombres como Solange, Florence + The Machine y Blood Orange, y es con este «BLOOD» que vemos su debut auspicioso y rico en esencias musicales. Su cello es el pincel perfecto para un lienzo tan amplio como las vertientes más enigmáticas del pop tales como el art pop, chamber pop, y dream pop, lo que por si fuera poco, tiene un toque exquisito de neo soul hechizante como hipnótico. Así como Erykah Badu unificó tantos sonidos en el pasado, Kelsey Lu está haciendo lo suyo con una ambición inusitada. «BLOOD» es un álbum bellísimo.- Jota
78. PUP – Morbid Stuff
¿Quién podría haber pensado que estaríamos hablando seriamente y con gusto sobre pop punk en estos tiempos? Pues agradezcan a PUP, banda canadiense que encontró dentro de su infinito amor por el género la ambición suficiente para darle un espaldarazo de niveles con este tremendo «Morbid Stuff», un disco que nos muestra una forma evolucionada del género, llena de vitalidad y relevancia, logrando la combinación perfecta de lo que hace un gran álbum. Uno el cual disfrutar, uno que recordar y atesorar por siempre.
Está demás decir que esto no se parece en absoluto a Green Day ni a blink-182, así que venga a escuchar algo nuevo, que está bien bueno.- Jota
77. Bat For Lashes – Lost Girls
Ningún álbum previo a Lost Girls había simbolizado tan bien lo que es la artista en su faceta más directa, igual de compleja pero más abierta a indagar en lo que ella necesitó en los momentos de concepción del disco. Las influencias cinematográficas, del New-Wave y Synth-Pop se hacen presentes como el cancionero generacional de los gustos más personales de Bat For Lashes, cautivando por sus arranques Dance, exploraciones y temáticas nostálgicas, siendo un álbum vibrante y amigable.- Felipe
76. VAGABON – Vagabon
El debut de Vagabon fue un disco redondo de emociones, canciones y carisma, sin embargo la valiente continuación descartó cualquier método, y se metió de lleno en darle otras atmósferas y virtudes sintéticas, a sus potentes composiciones. Esta obra reclama el trono como uno de los puntos de vista de autora más relevantes, tanto por su crítica a la romantización del dolor Afro (bajo estigmas raciales y sociales), como por el fuerte clima de pasiones y tensiones presentes en este corazón homónimo de destrezas y caídas.- Felipe
75. The Twilight Sad – IT WON/T BE LIKE THIS ALL THE TIME
¿Cómo conseguir un sonido post-punk de los 70’s en una época en que prima lo digital? el conjunto escocés The Twilight Sad maneja a la perfección la utilidad de este recurso, como sonar a pasado y a futuro al mismo tiempo. La vuelta a lo grande de un género tan importante como lo es el post-punk tuvo que venir de mano de IT WON/T BE LIKE THIS ALL THE TIME, donde recurrir a lo atmosférico en una oda a bandas como The Smiths o Echo & The Bunnymen con acento escocés le da toda la característica a este álbum para convertirse en uno de los primordiales en resurgir un género en pleno 2019.- Hernán
74. Elizabeth Colour Wheel – Nocebo
Con una conceptualización sonora que ellos mismos denominan «shoepunk doom«, Elizabeth Colour Wheel nos entrega uno de esos álbumes de los que simplemente no hay. Uno que de alguna manera se las arregló para juntar dos sonidos tan opuestos como lo son el lentísimo doom o el acelerado punk. Por si fuera poco, encuentran un recoveco para perfeccionar la fórmula con las texturas del shoegaze, extrapolando su fortaleza a tal punto de agresividad y crudeza que se transforma en una quimera única hambrienta de noise, engendrando una bestia de alto impacto que no debe pasar desapercibida.- Jota
73. Marika Hackman – Any Human Friend
El conocerse a sí mismo bien puede ser un arte, y es que en esta ocasión Marika Hackman dejó la complacencia con los demás para enfocarse en sí misma a su manera, en un acto de amor propio que sin dudarlo una sola vez, nos entregó una obra fascinante del indie y el tremendo abanico de ideas que se pueden profesar de ahí.
Así, Hackman evoca con su guitarra –o sin ella–, distintas formas de indie que bien obedecen a su estado anímico, porque es necesario hacerlo. Así, el indie aparece en su forma guitarrera que bien puede ser folk, power pop, o indie rock hecho y derecho. Ni hablar de su faceta más artística que ve en el art pop un abanico de ideas infinito que tan bien hacen en hacer de esta, su consolidación.- Jota
72. The Chemical Brothers – No Geography
Los Chemical Brothers retomaron viejas rutinas y le brindaron un modo de ejecución musical basado en explorar y experimentar, sus capítulos más elaborados en años. No Geography pertenece a esa sacudida de Beat Británico pero lidiando con el límite de la euforia electrónica más pragmática, entablando diálogos con el lado más osado, cambiante y liberado de cualquier atadura, quitando la comodidad de su nombre, en plan de aventurarse hasta más no poder en un equilibrado, arriesgado y fulminante ejercicio de Dance y perdición.- Felipe
71. Caroline Polachek – PANG
La aproximación más contemporánea del Pop, se toma sus minutos y desencadena todo tipo de nuevas formulas sin fronteras dentro de lo que la composición puede ofrecernos. Existen rasgos de grandeza dentro de ese lado más Art que le impregna a sus bases sintetizadas, que conocen bien de soltura, sin caer en los excesos típicos de los moduladores de voz. Caroline Polachek se atreve en un trabajo que marca pauta absoluta de cómo puede llegar a sonar la música en los próximos meses, siendo este PANG un buen ejercicio de maestría y originalidad.- Felipe
70. Jenny Hval – The Practice Of Love
Jenny Hval demostró con creces la tranquilidad y la mesura para bordar un disco sumamente consciente y bello, que mantiene la frescura de ese pop onírico y de harta producción. De la escuela de Björk, la cantautora noruega nos entrega texturas y canciones sumergidas en armonías y melodías de ensueño y significativas, generando la consciencia y madurez con una producción de lujo.
The Practice of Love es de esos discos que se mantienen frescos y que son atemporales, aún siendo sumamente subestimado o poco conocido, lo que le llena aún más de valor a su trabajo.- Hernán
69. TOOL – Fear Inoculum
Fear Inoculum representa la cúspide del sonido y la importancia de una banda como TOOL, la cual encuentra en este quinto larga duración, la formula perfecta para abordar todas las demás expresiones de caos, crítica, complejidad espiritual y existencial que Jones, Carey, Justin y Maynard impregnan a su obra. Paisajes monumentales que funcionan como un encuentro compositivo con el ADN del grupo, sirviendo además como crecimiento (más que evolución) para abordar las inalcanzables cuotas de virtuosismo y corazón dispuestas tan bien en cortes como «Pneuma» o «7empest». Todo lo que un fanático pudiera esperar.- Felipe
68. THE NOVEMBERS – ANGELS
Esta agrupación nipona tuvo una de las metamorfosis más significativas del año, dejando cualquier sesgo del rock alternativo para aceptar con gusto cuanto sonido e influencia quisieran, con un carisma inconfundible. Sí, este disco presenta una nueva nomenclatura de pop, teniendo así genes dream pop, art pop, indie rock, indie pop, e incluso noise y funk si así lo requieren, creando esa gran carta de triunfo que THE NOVEMBERS jugó en esta pasada: una muestra íntima y emotiva de cuanta maravilla existe en el mundo de la música.
67. Jenny Lewis – On The Line
Siempre hay mucho que decir y eso bien lo supo Jenny Lewis, quien en este On the Line, saca a relucir una faceta de compositora entrañable, evocando todo tipo de canciones con aires atemporales que encuentran su fortaleza en lo sólido de sus canciones. En medio de versiones personales, Lewis profundiza sus fantasmas con una carga emocional directa, advirtiendo casi por completo la personalidad y el desplante de una cantautora en estado de gracia, desarrollando todo a su paso con una cohesión única y brillante, siendo este un disco honesto, con aires clásicos, en donde se nota que la artista necesitaba expulsar y enterrar ciertos temas pendientes.- Felipe
66. Like A Villain – What Makes Vulnerability Good
Otro discazo que encontramos –bastante– abajo del radar, es este manifiesto único y personal de Like A Villain, una cantautora estadounidense que con su creatividad sin límites y su prodigiosa voz nos acaba de entregar un álbum fascinante de la música experimental más a la vanguardia. «What Makes Vulnerability Good» tiene un recorrido crudo y bello sobre las emociones de una Holland Andrews que sí que sabe de la vida, y por sobre todo, de la muerte también, y en esa dimensión dispuesta existe un vertiginoso paso por el ambient, la música neoclásica, la ópera, el industrial, la psicodelia y cuantos sonidos más que aún en su abundancia, no se comparan al tremendo rango de notas y texturas de la voz de Andrews.- Jota
65. 100 gecs – 1000 gecs
A modo de resumir el año, uno de los géneros que surgen en un estilo más novedoso, o en su debido respecto, que se va tomando en serio cada vez más, con exponentes como Charli XCX en su último trabajo, lo de 100 gecs es digno de reconocer.
En su disco 1000 gecs hay una suerte de experimentación totalmente en base a la hiperproducción, con una sensación de quebradura total en su función. 1000 gecs mantiene esa vibra intranquila -casi de DDR- pero que entretiene en todo momento, no te deja respirar y eso lo hace sumamente interesante. En este caso nos libera de la tensión, con un álbum sumamente novedoso y estéticamente extraño, pero a su vez que va dando los cimientos a una locura nueva y que es capaz de generar un movimiento próximo en las productoras.- Hernán
64. Leprous – Pitfalls
«Pitfalls» es prueba fehaciente e irrefutable de que para Leprous no hay imposibles. No es sólo el hecho de que han lanzado álbumes sagradamente cada dos años, sino que cada uno de ellos es un mundo particular y único, conformado una discografía variada y reconocida por la constante sed de evolución de los noruegos. En este caso, la banda ha demostrado con sutileza y elegancia sus conocimientos en el mundo del pop, elaborando una obra maestra que bien puede servir de puente para géneros que no siempre van de la mano, sellando con firmeza la asombrosa década que tuvieron, encumbrándose como uno de los grandes nombres del prog.- Jota
63. Michael Kiwanuka – KIWANUKA
Lo que aporta KIWANUKA, dentro del aspecto más creativo de la música de raíz Afro, trasciende momentos y épocas, centrándose en brillar desde la agudeza y astucia de una obra que impacta por su alto contenido musical, como por el carácter vibrante de su autoría. El buen Michael Kiwanuka entrega los esbozos de una carta magna dentro de las apologías personales, los ribetes racistas de su experiencia y la exploración de cuanto ritmo y melodía pase por su cabeza, perfectamente ejecutada desde un corazón conmovedor pero ya mucho más endurecido.- Felipe
62. LOOΠΔ – [X X]
Con un concepto de lo más extraño en la industria del K-pop, LOOΠΔ en [XX] demuestra la calidad de la producción y la sutileza en como interpretar, generar esa textura que era muy difícil de entrometerse en el K-pop, para hablar de un salto en la idea del pop coreano, más distinta y con un tono a la experimentación.
[XX] es una repackage que da lugar a un dream pop mainstream y cuidadoso, con voces cristalinas y texturas oníricas, deslumbrando en un disco muy acabado, correcto y distintivo de la industria que es tendencia y dejando en claro el concepto, la idea de un proyecto más grande de lo que vemos ahora mismo en LOOΠΔ.- Hernán
61. Matana Roberts – COIN COIN Chapter Four: Memphis
En este nuevo capítulo, la saxofonista nos deleitó con una relato libre e intenso de jazz, instrumentalizando al género en sí mismo para concebirlo como el elemento central de esta narrativa que recorre las raíces e historia de la misma Matana Roberts, lo que termina por instaurar un álbum sin igual tanto en sus propósitos como en su mismísima ejecución. Más libre que el free jazz, pero más recatado que la figura del jam; Roberts hace de cada instrumento un personaje partícipe absorbiendo nuestros sentidos del todo.- Jota
60. FONTAINES D.C. – Dogrel
Una de las bandas revelaciones de la escena del post-punk que surgieron durante el año fue FONTAINES D.C., con una propuesta que es más cercana a la flexibilidad sonora de nombres como Iggy Pop o The Libertines. Así, «Dogrel» es un compendio fascinante de canciones que, en su sencillez, viajan por un entramado complejo de matices que tan bien personifica la voz deliberadamente inexpresiva pero llena de carisma de Gria Chatten. También es como una suerte de «versión punk» del britpop, o al menos así es como se siente.- Jota
59. Kim Gordon – No Home Record 
El auspicioso gesto discográfico de Kim Gordon como solista, conoce de sabores familiares, texturas extrañas y una visión que contempla la construcción de puentes entre la música moderna y su clásica forma de saturar, distorsionar y acuñar al mismo tiempo, el sentido Pop a su música. Así No Home Record nos recuerda el poder de la experimentación, en donde reside una urgencia y necesidad por explorar todo lo necesario hasta encontrar el sentido de vigencia ganado desde siempre por una artista tan extrema como intrigante. Cada cierto tiempo Kim nos recuerda el porqué de su grandeza.- Felipe
58. Nicola Cruz – Siku
El productor ecuatoriano nos entrega un álbum rico en sabores latinos encumbrados de maneras diversas, evocando con misticismo y un feeling único el salvaje Amazonas o a la majestuosidad de la Cordillera de los Andes. Con tamaña fuente de inspiración, Nicola Cruz nos entrega la electronica más enigmática y dispuesta a ponernos en trance para enseñarnos los secretos del mundo de ser necesario, con beats calurosos e hipnóticos así como con samples espesos repletos de groove.- Jota
57. Chelsea Wolfe – Birth Of Violence
«Birth Of Violence» de cierta manera significa para Chelsea Wolfe la obtención más inmediata de la atención de un mundo que aún persiste en resistirse a sus encantos experimentales únicos. Puede que eso se deba a que este álbum muestra a la cantautora en su faceta folk –y a la vez, la más accesible hasta la fecha– sin dejar de lado esa actitud temeraria e inquieta residente en su creatividad, lo que al mismo tiempo –y sin quererlo– se condecora como uno de los trabajos particulares y únicos en su estirpe dentro de la gama del folk. Pareciera que no existe ningún obstáculo inexpugnable para Chelsea Wolfe.- Jota
56. Holly Herndon – PROTO
La mecánica con la que Holly Herndon exprime sus ideas, sumando además un software creado por ella para analizar las voces de muchas maneras posibles, termina por imaginar un álbum gestor, sobre las deshumanizaciones y la comunión espiritual de todo lo que nos forma y creamos. PROTO es el concepto final de la artista para una obra desafiante, en la que temas como «Crawler» habitan junto a poblaciones como «Eternal» o la magnifica «Frontier».- Felipe
55. BROCKHAMPTON – Ginger
Tras un hiatus luego de lanzamiento tras lanzamiento, la energía se acaba y había que reflexionar sobre la música y darle un respiro. BROCKHAMPTON en Ginger trabaja desde lo más maduro y sincero, una tristeza generalizada por los acontecimientos en el grupo, pero que a su vez les da para regenerar y recobrar las vibras.
Ginger maneja con sutileza los estribillos pegajosos y saturadores, con ese rap de máquina, oscuro y al hueso, banger tras banger. Ginger también da espacio a la calma y el respiro como si fuese un álbum casi terapéutico. Manifiesta una sensación de dolor guiada por Kevin Abstract y aterrizada en una consolidación, dejando este álbum como una guía espiritual y que traspasa a ser un pilar importante dentro del rap del 2019.- Hernán
54. Solange – When I Get Home
Sí, ciertamente «When I Get Home» no ostenta de la inconmensurable grandeza del precioso «A Seat At The Table» (2016), pero eso no obsta bajo ningún motivo de que este nuevo esfuerzo discográfico de Solange signifique una evolución de envergadura al tributar y reimaginar bajo su lupa neo-soul, el rap característico de Houston. Así, Knowles nos fascina con cambios rítmicos y texturas inusitadas que enaltecen aún más su figura e importancia dentro de la música. A estas alturas, una eminencia total.- Jota
53. KÁRYYN – THE QUANTA SERIES
No existen muchos álbumes como el que KÁRYYN nos brindó este año. Una pieza artística bajo todo el significado de la palabra que manufactura minuciosamente con triquiñuelas y conceptos de la electronica, un disco de ambient que entabla una lectura distinta del género, una mucho más pop. Así, con una interpretación versátil e hipnótica, sin dejar los experimentos de lado en ningún momento, la sirio-estadounidense texturiza su música de maneras complejas y tan irresistibles que hacen click en nuestra persona como pocas veces sucede en la vida.- Jota
52. Sleater-Kinney – The Center Won’t Hold
The Center Won’t Hold conoce de intensidades a frustraciones, abordando de una manera muy distinta la música que termina entregando Sleater-Kinney en una faceta más experimental, cercana a ratos al Pop-Rock que conoce de melodías como de crudezas. Esta fusión de sonidos se abre a tantos niveles, construyendo puentes entre temas como la que da nombre al disco, «Reach Out» o «Can I Go On», tal vez esta última donde se note más la importancia de St. Vincent en la producción. La salida de Janet Weiss les trajo tantas complicaciones como liberaciones, siendo una obra que merece tomarse su propio respiro. La excelencia se mantiene.- Felipe
51. Devin Townsend – Empath
El científico loco del metal nos entregó su obra más compleja, exuberante y desafiante de toda su discografía. «Empath» además de gozar de un designio de activismo climático bien contundente, nos posiciona a Devin Townsend como un ente creador de sueños que ve en el prog metal un catalizador para cada uno de sus anhelos que ciertamente ignoran cualquier convención. De ahí que este recorrido intenso nos lleve por el prog, la space opera, la ópera en sí –incluso en su variante de musicales–, la música de videojuegos, el disco, el death metal, el djent, y un sinfín de posibilidades que pareciera que sólo el canadiense es capaz de conjugar tanto exceso con elegancia y una estricta pero fascinante visión.- Jota
50. Jessica Pratt – Quiet Signs
En un año en donde el folk y el chamber pop explotó todo su potencial, Jessica Pratt nos dio una pincelada de un disco casi perfecto. Quiet Signs evocó una atmósfera limpia con solo instrumentación orgánica. El piano y la guitarra, acompañados de una voz angelical y pasajes jazzeros y blues tropicales para reconfortarnos en este disco de 27 minutos solamente. Quiet Signs es terminar de pulir un estilo preciso y lo-fi dentro de la carrera de Jessica Pratt, bordar la ambiciosa tarea de recorrer esos antiguos vinilos de folk y plasmarlos en un digital.- Hernán
49. The Japanese House – Good at Falling
Directo desde la misma casa discográfica de The 1975 y Wolf Alice, aparece The Japanese House con todas las intenciones de repensar la forma en la que entendemos el pop más indie, siendo este «Good at Falling» el debut y oportunidad perfecta para que Amber Bain manufacture con delicadeza y detallismo piezas de indie pop sensibles imaginas con una lógica que yace en la indietronica. Además, la capacidad de interpretación de la británica se maneja tanto en la capacidad de expresión así como en su habilidad de crear melodías vocales y cadencias atípicas tan exquisitas.- Jota
48. JAMBINAI – ONDA
Sin duda uno de los discos más sólidos de post-rock del 2019, por no decir el mejor. El conjunto proveniente de Corea del Sur caracterizado por la utilización de una instrumentación folk típica del país, combinándola con el sonido de ensueño de un post-rock arriesgado e intrépido, permite concentrarlo en este maravilloso disco llamado ONDA. El relucir de la ambientación, casi de soundtrack de película, con una producción estremecedora, redondea a un carismático e intenso LP que nos hace entrometernos dentro de la propia concepción del grupo que tiene por la música.- Hernán
47. Heavenstamp – Heavenstamp
Otra gran metamorfosis fue la que sucedió en Heavenstamp, agrupación nipona que se entregó en cuerpo y alma a los cándidos brazos del pop, entregándonos en este álbum homónimo melodías de ensueño, endulzadas con el mejor elixir para así inundar en un ambiente acogedor a cualquiera de sus oyentes. Existe cierta versatilidad en las distintas formas que utilizan –que bien podrían compararse, de manera autónoma, ante nombres de la talla de Carly Rae Jepsen y Taylor Swift–, lo que al entablar una relación simétrica entre lo sintético y lo orgánico, hacen del pop de Sally#Cinnamon y cía. único en su clase.- Jota
46. Blanck Mass – Animated Violence Mild
Frenético, bohemio, peligroso, adictivo e hipnótico. El magnetismo que Blanck Mass depositó en este «Animated Violence Mild» va más allá de cualquier preconcepto tanto de la electronica mainstream como de la faceta experimental del género, demostrando que la accesibilidad y el deseo insaciable de fiesta perfectamente puede ser compatible con directrices avanzadas a sus tiempos, aportando de manera inconmensurable al electro.
Así bien, el productor aprovecha la maleabilidad del IDM para bañarlo en una espesa capa de electro-industrial –la gran estrella del disco–, así como entablar uno que otro detalle aquí y por allá de noise. ¿El resultado? Pues un frenesí extasiado de belleza y ansiedades que bien puede ser el soundtrack de la fiesta del fin del mundo.- Jota
45. Common Holly – When I say to you Black Lightning
Con una poesía enigmática que imbuye cada verso de Common Holly, la cantautora profesa la vanguardia por sobre todas las cosas en su visión única de lo que es el indie folk para ella. Aventurero y rupturista, pulcro y sucio, aterrizado y apasionado; «When I say to you Black Lightning» es uno de los discos más fascinantes que ha visto el género –algo a la altura de Angel Olsen, Sufjan Stevens, y Bon Iver– y aún así en una palestra tan distinta.
Prepárense para integrarse a un mundo donde el indie folk es tanto catalizador como receptáculo de directrices derivadas del prog, indie rock, math, y la psicodelia. Common Holly nos entregó un álbum realmente cautivador.- Jota
44. Danny Brown – uknowwhatimsayin¿
Si Atrocity Exhibition supuso la cima de su faceta más propia, uknowwhatimsayin¿ tomó todos aquellos aspectos extraños e inquietantes de su personalidad musical, y los depositó en las manos del Rap más clásico, forjado por su propio genio, con atenciones de Q-Tip en producción. Así, canciones como «Dirty Laundry», «Negro Spiritual», «Best Life» o «Theme Song» sirven como muestreo de las tantas ideas que circulan en la mente de un Rapero fascinante y poco valorado como Danny Brown, dispuesto a volarte la cabeza una, y otra, y otra vez con joyas como este disco.- Felipe
43. Helado Negro – This Is How You Smile
Lo que pinta Helado Negro en este magistral This is How you Smile, difiere un poco de los dotes más bailables dentro de su música, acercándose a una especie de paz interior que aflora con un sentido mágico de profundidad y emotividad. De esta manera la banda de raíz Latina (Ecuador), conecta al instante con un sentir reposado pero agudo, interponiendo cuantas capaz de emociones sean necesarias, entre canciones que nos hablan tanto de política como de experiencias personales. Equilibrado y evocador.- Felipe
42. Employed To Serve – Eternal Forward Motion
Piezas tan estridentes como «Force Fed«, la furiosa «Beneath It All«, o la profunda «We Forgot You» son tan sólo unos cuantos argumentos de porqué «Eternal Forward Motion» es la consolidación definitiva de una banda que se planteó hacer las cosas con honestidad pura desde el principio. Desde sus comienzos en Holy Roar Records –y ahora bajo el alero de Spinefarm Records–, Employed To Serve ha depositado todos sus esfuerzos en entregarnos una forma dura y visceral del hardcore más metálico y portentoso, uno en el que en este álbum conectamos con inmediatez y celebramos el dinamismo incesante que inunda cada rincón de este discazo.- Jota
41. Anderson .Paak – Ventura
En Ventura de Anderson .Paak nos sentamos en la comodidad de su casa, indagando en una especie de cotidianidad de canciones que conviven entre sí con tanta buena vibra, respecto al carácter Soul que definitivamente le queda mejor al músico. El Rapero se mezcla con soltura por todo tipo de sonidos y fragancias, siendo cortes como «Come Home» o «Winners Circle» parte de una perfección sonora alcanzada en una obra, que también se dispone a entregarnos hits como «King James» o la maravillosa «Make It Better». La libertad creativa capturada en este nuevo trabajo, definitivamente nos lo hace tener más que presente de cara a una nueva década.- Felipe
40. yeule – Serotonin II
En «Serotonin II» somos testigos de algo realmente grande, y es que yeule –una entidad digital– nos trae la música del futuro conjurado con mesura y brillantez en lo que podríamos definir como ambient pop, pero que al indagar aún con mayor profunidad –porque así es el magnetismo de yeule– encontramos dream pop, electronica, e incluso arreglos que bien pueden ser del post-rock. Dicho de otra manera, podemos encontrar las texturas de Beach House, las maneras de Grimes, la producción del Radiohead y el The 1975 más alternativo, e incluso la suavidad de los muros de sonido de Sigur Rós.
Ni hablar de la sensibilidad depositada en cada verso así como en su interpretación única, propiciando un aura que acaricia levemente nuestras personas.- Jota
39. Vampire Weekend – Father Of The Bride
El pasar del tiempo a veces oxida a las bandas que alguna vez fueron tan frescas e incandescentes con sus debut. Vampire Weekend es una de esas excepciones donde, con el paso del tiempo, cada vez se nota que todavía existe ese tremendo potencial que los sacó a relucir en su homónimo del 2008 o en el Contra (2010).
Father Of The Bride toma un giro rotundo a su sonido indie/afropop original, tomando las riendas de una maduración del estilo, sacando una obra que permite aceptar el paso de la década, sin obstaculizar esa oxidación y sacando a relucir la capacidad creativa de realizar algo distinto. La intromisión de ciertas pizcas de flamenco, balada, country y folk emancipa el sonido y lo acomoda a una lectura más actual y sin tanta malicia como en sus primeros álbumes. Sin duda que los Weekend tienen para rato y con este disco en particular, dejó que hablar en las listas del pasado año.- Hernán
38. Sampa The Great – The Return
El debut de Sampa the Great se abre a todo tipo de testimonios de vida, pensamientos y conceptos artísticos entregando total libertad a adoptar géneros como el R&B, el Rap o el Reggae; la raíz Afro en su esencia. The Return recorre tantas facetas desde la movida «Freedom», pasando por el grito más voraz en la gigante «Final Form» o «The Return», muestran tantas aptitudes como personalidades de una Rapera con total conocimiento de las injusticias y reinvindicaciones de clase o raza imperantes en cada rincón del disco.- Felipe
37. American Football – American Football (LP3)
Con un regreso glorioso y maduro, American Football con su tercer registro demuestra que puede llevar las cosas a otro nivel. En LP3 nos da a conocer su faceta más prístina, cercana y real. Con una fuerte lírica y sonido extremadamente cuidadoso. Cálido y emotivo, intenso y nostálgico y recurriendo a features extraordinarios con Elizabeth Powell de Land Of Talk, Hayley Williams de Paramore (aludiendo a la famosa canción de Pink Floyd) y Rachel Goswell de Slowdive, demostrando la manera de trabajar de los oriundos de Illinois. LP3 quizás sea un salto en comparación con su símil del 2016, aunque mantiene la postura midwest emo del álbum de 1999, donde van convergiendo los distintos estilos en una composición tremenda, agregándole un toque de humanidad y matiz.- Hernán
36. Brittany Howard – Jaime
«Jaime» es un manifiesto lleno de sufrimiento, añoranzas por un mundo mejor e intimidad de una Brittany Howard que hace del sabor de sus guitarras y la intensidad de su voz un cambio con mayor libertad a la que profesaba en Alabama Shakes. Si bien en su banda madre ha sabido hacer de las suyas de manera excelsa, quien hubiera adivinado la caja de Pandora que es la persona de Brittany en sí, que en este debut solista derrocha con vigor una ventisca de blues y soul, y todo lo que esté entre medio, así sea el funk, el rap, o el rock mismo. Visionaria total.- Jota
35. slowthai – Nothing Great About Britain
El aparente lado más intimidante de un adicto al humor negro como a la consciencia de clases como slowthai, adquirió total relevancia con todo el asunto Británico del Brexit y la posterior dimisión de Theresa May. Nothing Great About Britain es el disco que nadie se atrevió a lanzar en un momento que se hacía necesario, dando mayor relevancia a los sonidos respectos al UK-Rap y Grime, con esta enarbolada muestra de crítica y resistencia, graficada de manera brillante, comenzando por su portada, aterrizando en callejones como «Inglorious» o la fascinante «Doorman» que no hacen más que describirnos esta fotografía de este lado del Reino Unido.- Felipe
34. Baroness – Gold & Grey
Baroness ha alcanzado cierta trascendencia, y es que «Gold & Grey» profesa un concepto único que entabla una dicotomía entre la belleza y la suciedad, algo tan estrictamente relacionada con la humanidad que es imposible no ver la inmensidad de lo que cada pieza de este álbum logra.
Hace rato que la agrupación estadounidense muestra atisbos más que contundentes de una ambición artística que va más allá del ya excelente sludge metal de sus inicios. Ahora, John Baizley y los suyos recrean una verdadera obra de arte matizada con elocuencia, mostrándonos distintas gamas del espectro cromático representado con la inmensidad del post-metal, la crudeza del sludge, y las decisiones creativas asiduas al prog y el post-rock, logrando un álbum conceptual de aquellos.- Jota
33. Cate Le Bon – Reward
Reward vino a renovar la trascendencia de la música Alternativa o Indie, desde una vereda mucho más artística , pausada, que requiere de mucha atención puesto que con cada nueva escucha, se va volviendo más grande. Y es que hay tantos elementos y detalles dentro de las poderosas canciones que Cate Le Bon dispone a nuestras manos, con la condición de que disfrutes al máximo. Maravillas como estas nos hablan de calidad sonora, en un estado emocional cautivador que van y vienen en temas como «Miami», «Home To You» o la tremenda «Daylight Matters», joyas que abundan en este profundo y emotivo muestreo de puro Art-Rock de autora.- Felipe
32. Xiu Xiu – Girl With a Basket of Fruit
Xiu Xiu, con una carrera más que consolidada, nos trajo a principios del año Girl With a Basket of Fruit, siendo, sin duda alguna, uno de los experimentos más trascendentales de este año. En este set de canciones que, ha primera vista parece una locura intangible, de fondo nos trae una macabra y triste alegoría a un sinfín de temas oscuros y tabúes dentro de la sociedad. En este compendio podemos notar el rupturismo puro, la vanguardia, tratar de unificar a Girl With a Basket of Fruit en un estilo o margen es imposible. Xiu Xiu ha dado luz a uno de los álbumes pilares de este año y pone fichas a una nueva idea de álbum conceptual.- Hernán
31. Julia Jacklin – Crushing
El desamor y la ruptura es una fuente infinita de emociones que en este «Crushing», la cantautora hace un paso crudo como íntimo de un proceso del cual todos hemos formado parte de alguna manera. Julia Jacklin nos entrega los acordes más cándidos como muestra de su generosidad por la cual impactar de alguna manera que sea de ayuda, o bien tan sólo hacernos saber que no estamos solos en procesos tan duros para las personas, y eso es algo que entendemos con la infinita dimensión que nos enseña su voz. Es cosa de escuchar una pieza tan sentida como lo es «Turn Me Down».- Jota
30. The Comet Is Coming – Trust In The Lifeforce Of The Deep Mistery
El trío londinense nos brinda lo que es el jazz del futuro, uno relacionado directamente con los enigmas de la vida qué, paradójicamente se encuentran con la naturaleza visceral del humano mismo. De ahí que todos estos ambientes adictivos saquen a la fuerza nuestro espíritu curioso y aventurero por conceptos trascendentales a través de algo tan común para el ser humano: el goce y disfrute de la vida.
¿Cómo no iba a ser así? Si The Comet Is Coming infunde su nü jazz con una fusión eterna entre esencias funk, psychedelic, y electronica, manufacturando con aires divinos y hasta bohemios una música a la que simplemente no podemos resistirnos.- Jota
29. Lorelle Meets The Obsolete – De Facto
El estado de trance que evoca Lorelle Meets The Obsolete en este quinto trabajo, explora a un nivel de detallismo puro, cada aspecto de la realidad mágica e hipnótica en las que nos encierra el dúo Mexicano con un sabor un tanto extraño, espeso pero que finalmente se impone como un registro de personalidad único. Difícil resulta indagar en una obra que se sumerge por completo en todo lo que se puede lograr desde la construcción del sonido, siendo sus constantes distorsiones y espacios de profundidad pausada, un enfoque dinámico para resaltar los tantos caminos que toma De Facto, un increíble trabajo sin miedo a nada.- Felipe
28. Denzel Curry – ZUU
En ZUU las verdades a ritmos violentos, de calle, dinámicos, rudos y hasta alternativos, se sumen a la posibilidad de poder gestar un retrato tan intenso del Miami Gardens- barrio natal-, a través de canciones que beben libremente de todo tipo de Rap en sus representaciones más oscuras y adrenalínicas. Un perfecto álbum que pretende representar la esencia del lugar en el que creciste, mostrando esos aires de clásicos que ya empieza a tener Denzel Curry.- Felipe
27. KAYTRANADA – BUBBA
KAYTRANADA tomó el papel de anfitrión en un BUBBA que suena brillante, vibrante, inquieto, trayendo la mejor versión del Dance en dónde las colaboraciones pasan a ser más una herramienta que un obstáculo. Así canciones magnéticas como «10%» junto a Kali Uchis, exprimen la beta más desarrollada de un productor seleccionando verdaderos volúmenes de hit tras hit, sin dar descanso, pausando, subiendo, excitando los oídos como nunca. Otras como «2 The Music»–feat. Iman Omari– rescatan el trance más introspectivo, con un manejo de las pulsaciones casi prodigio.- Felipe
26. Slipknot – We Are Not Your Kind
Tras un 2019 fructífero en todos los géneros, uno de los pilares en el Metal fue sin duda Slipknot con su sexto álbum We Are Not Your Kind. La banda de Iowa resurge dentro del estilo, dando un salto inmenso con respecto a sus anteriores trabajos: The Gray Chapter y All Hope is Gone. En este extenso, Slipknot modifica la estructura de los hits inmediatos de sus discos predecesores, para dar paso a un sonido muchísimo más oscuro y que rememora la obra maestra del 2001, Iowa.
We Are Not Your Kind trabaja de a poco, construye una atmósfera de disonancia y extrañeza, se da tiempo de experimentar con ciertos recursos que quizás eran nuevos para la banda, pero que no da pie a una mala interpretación, ni un cambio radical, más bien es un reforzar justo que revive los mejores tiempos del grupo, donde la composición era clave, la habilidad de expresar y retratar esa abominable y ensordecedora realidad. Sin duda que es de los mejores trabajos de la banda, donde dejan de lado el cliché sonoro y se dan la sutileza de generar un disco tremendamente concreto y oscuro.- Hernán
25. Lizzo – Cuz I Love You
La cantante Lizzo hace cuentas de uno de los hitos del pasado 2019 en cuanto a pop se refiere. Cuz I Love You es una fiereza de personalidad, la portentosa voz de Lizzo inmiscuida hasta el máximo dentro de un pasaje R&B en un formato pop, añadiendo espectros de rap y versatilidad, dándonos a entender el contexto musical que estamos viviendo.
La calidad de la artista, trascendiendo a ese nivel de “estrella” que genera la fluidez del álbum, con esa pizca de amor propio que lo hace grandioso. Un álbum muy entretenido de escuchar, en ningún momento hay un bajón, hay una tremenda realización de interpretación vocal para quedarse muy entrometido en el registro.- Hernán
24. Charli XCX – Charli
La visión que Charli XCX ha profesado toda la década al fin ha llegado al lugar que la cantante siempre mereció. Combatiendo los prejuicios que la crítica y el público tiene ante el aspecto sintético del PC music y el bubblegum pop, prevaleció ante todo y todos entregándonos en este «Charli» un álbum que marcará un antes y un después en el pop.
La inglesa no sólo tiene una tremenda habilidad para crear hits que quedarán en nuestro imaginario por siempre, sino que su lucidez a la hora de experimentar es hasta temible. De ahí que utilice todo lo que esté a su alcance, para lograr su objetivo, aunque eso signifique instaurar –y sin quererlo– la nueva ola del género de aquí a la nueva década. Sólo una persona con un control creativo tan riguroso como experimental podría tener en un mismo álbum a nombres como Lizzo, Troye Sivan, Clairo, HAIM, Pabllo Vittar, y tantos otros. Realmente bravo.- Jota
23. Better Oblivion Community Center – Better Oblivion Community Center
Este proyecto entre Connor Oberst y la mismísima Phoebe Bridgers –quienes ya habían trabajado juntos con anterioridad en el elepé solista de la cantante– es nada más ni menos que un compendio de canciones que resguardar muy, pero muy cerca del corazón. Así, Better Oblivion Community Center nos presenta canciones cándidas de un folk con una presencia emocional tan grande que llega a ser abrumador como, desde la cotidianidad, Phoebe y Connor encuentran las palabras exactas para estremecer y conmover a quien fuera, y de paso, quedando como una de los proyectos folk más fascinantes que hay.
Puras buenas canciones, puro feeling, puro cariño en cada acorde. Si hasta muestran aptitudes y la visión necesaria para unificar el indie rock y el folk de maneras no tan exploradas como creíamos. Además, consolida a Phoebe Bridgers como uno de los nombres más importantes del género con un carrera tan abundante dentro de los pocos años que ha estado en el ruedo –a propósito de su carrera solista y el supergrupo boygenius–. Qué ganas de ver más de este proyecto.- Jota
22. Ladytron – Ladytron
El gran mérito del homónimo que Ladytron a principios de año, sienta las bases de ese sonido Synth-Pop espacial y dramático, abierto a indagar en todo tipo de escenarios que la banda muy bien conduce en este álbum. Nadie suena como ellos, y es que la fusión vocal entre Helen Marnie y Mira Aroyo le otorgan un nuevo sentido de universalidad musical tipo Pop a los saturados aspectos sonoros, inducidos en ciertos casos por géneros como el Industrial, Shoegaze. La forma cohesionada donde conviven cortes como «The Animals», «Far From Home», «Until the Fire» o «The Mountain» –8 años después– dan luz del buen foco que mantiene la banda, en tiempos que seguramente sabrán entenderse mejor.- Felipe
21. Purple Mountains – Purple Mountains
David Berman podría haber grabado este disco como uno de los Silver Jews, pero hubiera perdido la trascendencia más personal, íntima, la que funciona como un periódico en este único testamento de pura genialidad. Purple Mountains funciona como un gigante instantáneo de la mejor tradición Folk, musicalmente abierta a explorar todo tipo de rítmicas y melodías, más aún importante dispuesto a entregarnos un mensaje de vida honestamente brutal, firmado posteriormente por su repentino deceso. Es en esta última historia donde conocemos la mejor versión de un cantautor iluminado por la idea de entregarnos su mejor obra.- Felipe
20. Freddie Gibbs & Madlib – Bandana
El perfecto collage de sonidos dispuestos magistralmente por Madlib en cada track, hacen despertar a un Rapero versátil dentro de sus conocimientos del juego, siendo Bandana la puerta de entrada a ese Rap más alternativo e impresionante. Freddie Gibbs va de protagonista a narrador, ampliando nuestras miradas en «Crime Pays», rematando en cortes como «Freestyle Shit» o dejando memorables momentos en «Giannis». Lo que esta obra hizo por el Rap este año, tendrá mucho que ver por como surgen renovadores de beats, devolvió al género la escena underground más pura y diversa.- Felipe
19. Jamila Woods – LEGACY! LEGACY!
El impacto de LEGACY! LEGACY! en las listas anuales, no dejó indiferente a ningún aficionado a la música y es que, en definitiva, estamos hablando de un exponente certero del R&B/Soul del 2019. Jamila Woods destaca en su segundo disco de estudio, generando una introspección personal que la proyecta en una suerte de compendio musical histórico, donde va alabando a ciertos íconos del género como Nina Simone, dejando entrever la poderosa interpretación soul, junto con los cánones del R&B contemporáneo.
Jamila, promueve la frescura en este disco, manejándose en un paisaje absolutamente melismático y maduro, elegante por decirlo menos. LEGACY! LEGACY! se ha convertido en un estandarte dentro del género, por lo artístico, lo jazzero, la producción y, por esta razón, queda dentro de nuestro top 20 de Espectador.- Hernán
18. Thom Yorke – ANIMA
Sabemos la capacidad de Thom Yorke para entrometernos en su mundo de ensueño electrónico, donde es capaz de generar esa ambigüedad sonora, trastocando esos sentimientos inconexos de nuestra memoria. ANIMA es un proyecto que valida esta situación, no solo a nivel musical si no a nivel audiovisual (cuando supimos que también iba a ser un corto junto a Paul Thomas Anderson), donde Thom nos somete a la ansiedad y a la belleza onírica que nos tenía acostumbrados, pero ahora de cierta forma se condensa en una estrategia más madura, corrigiendo la mescolanza y la textura a un nivel de producción mortífero.
ANIMA nos dejó en una situación distintiva, considerando la separación de sonido que debía proyectar con Radiohead y, como solista, lo ha logrado de manera fructífera. ANIMA sin duda ha dejado en claro que, la tradición de Thom Yorke aún está vigente y madura, dejándonos con esta obra maravillosa, encontrando esa belleza fascinante dentro de lo extraño y oscuro.- Hernán
17. JPEGMAFIA – All My Heroes Are Cornballs
El rapero JPEGMAFIA que ha sabido hacerse un nombre en la escena a punta de una pasión gigantesca por la experimentación, elevando al rap a niveles impensados. Así, en «All My Heroes Are Cornballs» recrea una encrucijada compleja entre la fuerza bruta de su pasión al mismo paso que los beats polimorfos sensibles y sorpresivos que se manda una, y otra, y otra vez. Por lo demás, su incursión exitosa en el canto en este esfuerzo discográfico le entrega un rango aún más grande por el cual jugar a su gusto, evocando un espíritu millennial tan entrañable que resuena de formas distintas en nosotros.
No hay que extrañarse si se convierte en un nombre líder en el género en la próxima década. La gigantez de su ambición es suficiente para ello.- Jota
16. Jinjer – Macro
La consolidación le vino bien a Jinjer, una banda que se ha hecho un nombre a punta de puro esfuerzo y trabajo duro –literalmente tuvieron que sortear el horror de la guerra en Ucrania–, y en este «Macro» cada gota de sudor y lágrima dieron frutos con creces.
Existe un temple único que opta por la experimentación a un nivel que nos rememora a nombres como Gojira o incluso Meshuggah, y es que Tatiana Shmaylyuk y sus compañeros engendraron una bestia única de metal extremo que acepta como el imán más poderoso cuanta influencia quieran, así sea del prog, el groove, el death metal, o incluso reggae, porque pueden, quieren, y les sale a la perfección.- Jota
15. Billie Eilish – WHEN WE ALL FALL ASLEEP, WHERE DO WE GO?
Aproximándose a nuestro top 10, tenemos en cuenta uno de los hitos del pop del pasado año y, sin más deambulaciones, queremos comentar WHEN WE ALL FALL ASLEEP, WHERE DO WE GO? de Billie Eilish.
Nadie pensaba en un debut tan popular en estos días y que generara tanta expectación como Billie lo hizo en este álbum. La capacidad que tuvo en realizar un acto independiente, junto con la ayuda productora de su hermano, mezclando un sonido sumamente extraño en el pop, casi susurrado, con ese motor de thriller que va generando la escucha de cada canción pero que, aun así, es capaz de retratar un hit de pop lo hace sumamente valorable.
En este disco trastoca lo distinto, la saturación, el susurro, la soledad y la mentalidad inestable y lo convierte en popular y atractivo para la generación Millenial o Centennial. WHEN WE ALL FALL ASLEEP, WHERE DO WE GO? es un hito musical de la década, es una extrañeza y es un cómodo relucir y exhalación de frescura que nos dejó el 2019.- Hernán
14. Sharon Van Etten – Remind Me Tomorrow
El vuelco de Sharon Van Etten hacia los sintetizadores, terminó cuajando una etapa creativa que conoce de maternidad, estudios, desafíos artísticos, entre otras cosas. Remind me Tomorrow cautiva desde varios puntos, tanto por sus poderosas canciones que tratan una madurez valiente y extasiada como por el carácter emotivo, nostálgico y personal, entregando clásicos para gritar a todo pulmón como «Seventeen» o perderse entre «Jupiter 4». Sharon creció al extremo de ya poder abrazar el sonido que quiera; siempre obtendremos algo más que una canción.- Felipe
13. black midi – Schlagenheim
Los ingleses tomaron al mundo por sorpresa. Su hambre y sed de experimentación es sin igual, y es que en black midi no existen reglas, sino que ellas las crean, las desarman, y las vuelven a armar de otra manera impensada.
«Schlagenheim» es un disco de rock bien histriónico de los cuales no se ven mucho, y es que literalmente condensan todo un espectro tan gigante que comprende cosas como el post-punk, el math rock, el noise, el prog, la psicodelia, y el garage. O sea, black midi hizo suya por lo menos tres décadas de la historia del rock mas experimental. Se vienen grandes cosas.- Jota
12. Rapsody – Eve
Lo mesiánico que parece Eve en su composición y costura, deja esa sensación de que es un álbum que sembrará grandes cosas para el Rap a futuro. El buen gusto por la experimentación que plantea Rapsody en este tercer disco, suma todo tipo de nuevos caminos a seguir a la hora de mezclar Rap en su beta más de raíz con vanguardia, sampleando «In the Air Tonight» de Phil Collins porque así lo viera necesario. Cada canción un homenaje a diversas heroínas de la Rapera, desde Oprah, Nina Simone hasta Aaliyah, siendo esta obra un templo de tormentos, declaraciones, confesiones y verdades.- Felipe
11. Big Thief – U.F.O.F. · Two Hands
Si con U.F.O.F. representan toda la mística alcanzada por unas composiciones elevadas a terrenos celestiales y oníricos, Two Hands les muestra más directos y crudos, entonados a la presencia emocional de una banda que este año matriculó por siempre su nombre en la historia de la música. Big Thief nos lleva por horizontes desconocidos en «Cattails», la orgánica y agonizante «Not» nos devuelven la fe en aquellas canciones extensas de clímax guitarrero, «UFOF» es la más extraña sensación de Folk de ensueño; así enumeramos acto tras acto de jugada creatividad y una artística ambición que tuvieron su espacio dentro de un año perfecto para el grupo.- Felipe
10. Otoboke Beaver – ITEKOMA HITS
Las niponas irrumpieron de la manera más agresiva y fascinante posible con «ITEKOMA HITS», una demostración punk única que hace de la libertad la premisa esencial de todo, sonando histriónico, impredecible, y adictivo. En Otoboke Beaver se toman la libertad muy a pecho, y es que a pura actitud y una personalidad avasalladora crean canciones explosivas que toman situaciones de la cotidianidad con una liviandad tan envidiable, que cada plot twist rítmico como melódico es un mundo en sí.
Así, la estridencia, el noise, y el libre albedrío adyacente en cada riff, verso y fill vienen a dar la bofetada más contundente a todo. Los prejuicios, la gente, el rock, el punk, a lo que sea, y es porque no hay nada que suene como Otoboke Beaver, y vaya que da gusto decir eso en una época donde muchos hablan con tanta ligereza de que ya se hizo de todo.- Jota
9. Little Simz – GREY Area
Little Simz buscó en sus confusiones y dudas, las crisis existenciales desde su niñez hasta sus 25 años y las transformó en esta comitiva de empoderamiento y personalidad: GREY Area. En este disco, su tercero, es la culmine de su corta carrera, remitiéndose a una tremenda capacidad lírica, casi prodigiosa, de retratar la actualidad, enfocándose en el machismo como en Venom o la individualidad de la sociedad en la elegante Selfish, también aludiendo a distintas figuras como Hendrix o Joplin junto con la colaboración de Michael Kiwanuka.
La sonoridad no se queda atrás, en un recubrimiento de texturas dulces y sedosas, pasando por el Jazz, Soul -entre otros- y convergiendo en la artillería pesada donde reluce todo el Flow que es capaz de generar Simz en este laberinto de emociones y que, en definitiva, mantiene alejado del ego burdo que emanaban –y emanan– los álbumes clásicos de Rap, trabajando desde el estado puro, creativo, eficaz y satisfactorio. GREY Area se ha convertido y se convertirá en un pilar de la década que comienza, el Rap femenino ha tomado un poder inconmensurable y artístico que destaca en este LP, ponderando a Little Simz como una artista de nivel que retratará y repercutirá en la década venidera.- Hernán
8. Ariana Grande – thank u, next
Ariana Grande nos entregó a principio de año un álbum que nos habla desde la seguridad y desde el empoderamiento sobre su misma persona. La diva toma todas sus experiencias de vida, por duras que hayan sido algunas, y crece a través del dolor de manera sana y florece con un brillo cegador.
Este «thank u, next» nos enseñó un par de cosas que van más allá de las tendencias. Ariana se la jugó como nunca, y nos brindó su mejor álbum, uno que no sólo resume su carrera –y hasta cierta manera, del pop en general– sino que creó un antes y un después en la nomenclatura en común que existe entre los sonidos urbanos y el pop, generando una tendencia tan arrolladora como toda la pasión que depositó en cada una de sus canciones, de las cuales son un hit tras otro.- Jota
7. Angel Olsen – All Mirrors
«All Mirrors» nos enseña a una Angel Olsen que salió del capullo del todo, floreciendo con una gracia inigualable, una personalidad magnética, y un desplante musical tan excelso como infinito. Atrás quedó la suavidad del folk y la crudeza del garage, Olsen golpea la mesa con una obra artística en toda su regla junto a la infinitud del chamber pop, uno que viaja por todo el espectro y nos enseña las distintas facetas de la cantautora, así como sus anhelos y deseos, penas y añoranzas, su luz y su oscuridad.
Angel Olsen es una eminencia absoluta, y en este álbum hace gala de su versatilidad sin límites, que es algo que se manifiesta tanto en el aspecto técnico, el tono, la escritura, la composición, así como su prodigiosa voz que ve todo su esplendor en un sinfín de texturas.- Jota
6. Nick Cave & The Bad Seeds – Ghosteen
En Ghosteen descansa la perdida, el duelo, la superación y elevación artística de un narrador destacado por su poética, narrativa, entonación y principalmente su creación. Nick Cave y los Bad Seeds alcanzaron el estado de unificación máxima en este testamento, que permite indagar en sus plegarias y deseos más personales, como en la concepción de estos hijos y dioses de carácter divinos separados por dos partes de un mismo álbum.- Felipe
5. LINGUA IGNOTA – CALIGULA
«CALIGULA» es un manifiesto que viene a exorcisar todos los demonios de esta sociedad aún aprisionada por el machismo, la misoginia y un número lamentablemente alto de abusadores escondidos por ahí en el mundo. Todo, obrado desde la visceralidad de la experiencia propia de Kristin Hayter aka LINGUA IGNOTA, depositando una pasión atemorizante en cada fibra de dolor, ansiedad, angustia y depresión, engendrando una bestia única en la música a nivel histórico.
Esto marca un hito, un antes y un después en muchos niveles. Ya está la urgencia y el compromiso del mensaje que a más de alguien incomodará, y es que es así de necesario, así de horroroso es este mundo. Pero hay esperanza, y LINGUA IGNOTA hace uso de cada uno de sus recursos, habilidades y conocimientos para ello, creando una obra con maestría inusitada que toma lo mejor de la música neoclásica, el industrial, el noise, y la experimentación en general. «CALIGULA» es una experiencia obligatoria.- Jota
4. Tyler, the Creator – IGOR
IGOR es todo un hito de la música, Tyler nos da a conocer su trabajo más acabado y maestro de toda su carrera. Hablar de la mística de Tyler en IGOR es gracias a sus antiguos registros donde se hacia parte de esa oscura manera de interpretar el Rap, dando ese toque de misticismo y horror burdo e incómodo. En base a lo anterior, el californiano nos interpreta un salto estratosférico a la interpretación/idealización del rap actual.
De la escuela de Kanye West, IGOR es una suerte de trascendencia musical a lo artístico, lo sonoro, la textura y la sutileza. IGOR manifiesta la excentricidad de un artista fuerte y provocativo, pero que tiene ese lado sensible y maduro que le permite retratar el amor y las relaciones personales en un compendio musical.
IGOR conlleva lo que hizo Tyler en Flower Boy y deja atrás la experimentación pura del Cherry Bomb, manejando ahora la habilidad de la pausa y respiro, lo orgánico y seductor, donde genera una base impresionista e imaginaria, pura y acabada. IGOR absorbe todo el mundo del synth pop ochentero y lo traduce a una forma de hacer rap artístico, junto con la mezcla funk, psicodélica, soul, dejando en claro el lenguaje que quiere crear el artista. Hablamos de un hito musical de la década y que va a llevar a interpretar de otra manera el rap como género y como sustancia.- Hernán
3. FKA twigs – MAGDALENE
La británica es tal vez la definición misma de lo que es ser artista, con un compromiso sin igual que no se vio mermado en lo más mínimo aún cuando el dolor era cosa de cada día tanto a nivel físico –quistes uterísticos diagnosticados en 2017– como a nivel emocional –la frustración de lo anterior así como la ruptura amorosa–. Tomándose el tiempo que sea necesario, en el cual la libertad del ser a nivel espiritual y corporal es clave en su visión, FKA twigs nos entrega una verdadera obra de arte.
«MAGDALENE» es una paleta entremezclada a su antojo, entre distintos colores y materiales, obrando al paso de su voz hipnótica y camaleónica un sinfín de esencias y sonidos que van desde una lógica avant-garde que no hacen más que entrometerse con todo a su paso: la electronica, el art pop, el neo-soul, lo que sea. Así es como nos entregó canciones que dejarán su marca en el paso del tiempo y se conectarán con este mismo por siempre, tales como «home with you«, «mary magdalene«, o la mismísima «cellophane» que debe ser de las mejores canciones del año, si es que no la mejor.
2. Lana Del Rey – Norman Fucking Rockwell!
Si tuviéramos que buscar una idea que defina de manera cercana el sexto álbum de Lana Del Rey sería sencillamente «una hermosa poética, cargada a la nostalgia, de canciones eternas y ecos en un presente que le pertenece tanto como su capacidad de monumental composición». Aquellos monolitos familiares, a su vez indagan en el poder de la palabra como motor de estas apasionantes canciones que tratan de todo: el amor, dinero, memorias, frustraciones, locura, el sueño Norteamericano, el cómo vivimos y nos involucramos.
Hay canciones para todo desde la que abre y nombra la obra, pasando por esa tirada mágica de «Mariners Apartment Complex» o «Venice Bitch», tan sentidas, atemporales y hasta ácidas mostrando el gran manejo de la trova (a la Lana), y la psicodelia más distorsionada y melódica. Norman Fucking Rockwell! es un tesoro innegable, heredero de la mejor tradición al momento de concebir tamaños himnos de todo tipo de sabores, colores, sueños y historias, de esas que se pasan de voz en voz.
«¿Es bueno el último de Lana?» Varias veces me han llegado estas preguntas y en lo personal, te aseguro que si no entras por una canción, sí lo harás por otra. En el fondo todas juntas adquieren un sentido personal y artístico; emocionante y sorprendente, «Cinnamon Girl», «Doin’ Time», «Fuck it I Love you», «hope is a dangerous thing for a woman like me to have – but i have it», «The greatest», y tantas otras simbolizando la etapa de mayor creatividad de Lana, la cual muestra madurez, personalidad y un sentido especial que sentará definitivamente algo en la música y la cultura Pop.- Felipe
1. Weyes Blood – Titanic Rising
Y finalizando el año 2019, último de la década (aunque sea controvertido), podemos concluir en un disco que marcó un precedente, un antes y un después y dar por terminado ese ciclo inconmensurable de los 2010’s. El gran disco del 2019 es sin duda Titanic Rising de la cantautora Natalie Mering A.K.A. Weyes Blood, destacando con su mejor trabajo hasta el momento tras una tríada de discos; Titanic Rising es su epítome, su sello y su futuro.
La grandilocuencia de un estilo casi abandonado, que rememora las vivencias de una década lejana y que, a su vez, la hace propia, la hace contemporánea, la revive y la sienta en la palestra moderna, generando una sincera y humana visión de sus memorias y pasiones. Titanic Rising es una travesía y una alegoría titánica -como dice su título- con ese estilo retro y Carpenteriano de los 60’s/70’s, los arreglos orquestales (violines) y la utilización de sintetizadores y arpegiadores que mueven fibras –de cualquier generación–.
Un álbum que no perecerá y que se siente atemporal de un género que fue demasiado fuerte para el 2019 como es el folk de cantautor con los discos de Lana o incluso el MAGDALENE de FKA twigs –únicamente un movimiento femenino que se ha incurrido dentro de los últimos años–. En Titanic Rising hay momentos álgidos de completa melancolía y de tremenda interpretación tanto vocal como la ejecución misma y orgánica, manteniendo una fluidez digna de admiración. Un álbum sumamente hermoso por donde se le mire y que es el gran merecedor del primer puesto de Expectador, dejando en claro, cual es el movimiento que se verá próximamente en la década que aún está por comenzar.- Hernán
