Escrito por Jocsán Sánchez
Fotos por María José Muñoz
El evento más importante del año a lo que música chilena se refiere. Entre variedad musical y visiones de proyectos futuros, la Feria Pulsar se asoma con un traje elegante en contexto de una apertura exitosa.
La gran Feria Pulsar, lugar donde la Estación Mapocho tiene como fin la unión de la comunidad musical. Músicos, técnicos y por qué no, público amante de esta área particular. Así, el evento tiene una responsabilidad de cubrir todo tipo de gusto, y entre quienes son invitados lo han cumplido bien.
El día viernes fue soñado. La experiencia se sintió como una verdadera charla genuina sobre la música. Cada detalle fue cubierto para que este ambiente se mantuviese a flote. Por su parte, la feria cumple una función visionaria entre quienes liderarán el mañana y los vigentes del debate público. En términos de Line Up y distribución de escenario, el evento mejoró considerablemente en relación al año pasado.
Artistas como tónica
La programación del día no estuvo enfocado únicamente en los artistas como tal, sino en un todo. Personajes icónicos y algo desconocidos para nuestro país se tornaron flameante en concordancia de sus logros. Cristóbal Tapia van Deer, ganador de un Emmy tras su trabajo detrás de la música de The White Lotus, dijo en relación a la nueva generación de artistas que «hay que tratar siempre seguir el instinto y hacer algo más personal. No caer en el molde de lo que se espera. Es un buen tiempo para hacer música experimental y original«.
Siguiendo esta línea, la selección cantautores que llevarían a cabo los conciertos fueron del todo prácticos y llamativos en medida. Desde ya, esta era un fecha un tanto especial. Públicos nuevos, distintos entre sí e incluso desconocidos. El desafío real era entretener a una audiencia nueva deseosa de conocer la apuesta que Pulsar les ofreció. Por una parte tuvimos participaciones de Fiskales Ad-hok en la Terraza. Misma que a pesar del calor, pudo albergar a una cantidad prudente de personas. Así mismo le siguió Malo2k, Laurela y como era de esperarse al cierre… Los Jaivas.
Por otra parte, la Sala de Artes se convirtió en un escenario único, en que su poco espacio generaba el deseo de estar en primera fila por más que cueste. Para este lugar hubieron números de artistas como Mr. Pilz, Camila Vaccaro, Mournes Lament, Guiso, Pedropiedra, Ariana Riffo, y al mismo tiempo que Los Jaivas, el recinto terminó con el número urbano de la noche, Jairo Vera.
Ambiente general
Es complicado explicar las sensaciones del día. Parecía que la Feria en sí la hizo la propia gente que asistió. Las ganas de escuchar y cantar música hicieron de esta jornada única. Así mismo para el disfrute de la gente, le regalaron un par de sonrisas a muchos nuevos cantantes con el sueño de triunfar. Para efectos de este escrito, se destacó mucho el número que brindó la agrupación penquista, ONIRICA. Un sonido particular que se llevó rotundamente la acústica de una antigua Estación Mapocho. Es tanto así, que el propio stand tenía un gran puño de personas que disfrutaron la interpretación de su primer disco Flores de Verano.
Finalmente para cerrar, los artistas Talao y Jack The Man compartieron que la experiencia en sí misma es beneficiosa. «Es una súper buena opción para configurar las carreras. Ver el trabajo de otros te ayuda a crecer«, adjudicó un orgulloso y contento Talao. Por ahora es el primer día, pero sin duda el sábado no cesará y buscará complementar este ambiente musical que tanto ha cautivado.