Por Rocío Villalón
Peces Raros es uno de los proyectos más particulares que se puedan ver tanto en Argentina como en Latinoamérica, e incluso en el mundo. Pocas veces se ha visto una propuesta musical tan comprometida con respetar las estéticas y sonoridades de cada idea que utilizan, así como, de alguna forma, seguir engendrando algo nuevo, como es el caso de los trasandinos en su fusión de electrónica y rock.
Con ya un par de visitas a nuestro país, conversamos con Lucio Consolo y Marco Viera, para indagar en distintos detalles de su carrera, y, sobre todo, hablar sobre su más reciente trabajo de estudio, ‘Artificial’, lanzado hace un mes aproximadamente.
¿Por qué se llaman Peces Raros?
Lucio: La teoría más fuerte es que nos llamamos Peces Raros por una traducción de una canción de Radiohead, del disco en In Rainbows (2007), en específico la canción “Weird Fishes”. También, hay gente que tiene otra teoría que es por Pescado Rabioso, lo cual nos gusta porque nosotros las vamos tomando y en definitiva no sabemos por qué.
Tuvimos una época en el primer disco, que la gente de hecho pensaba que escuchábamos un montón Spinetta y no lo escuchábamos tanto de grandes empezamos a escucharlo.
¿Ustedes creen que el nombre se relaciona con su estilo de música?
Marco: Justo hoy un muchacho nos mandó un mensaje, en el que nos mostró que se hizo un tatuaje de un disco nuestro y decía “aguanten los raros”, es bueno que se identifiquen con ser diferente.
En nuestra música hay una mixtura que no ha sido tan explorada entre el rock y la electrónica. Si bien, hay un montón de referentes para nosotros como lo de nuestra Argentina y otras influencias. Por lo menos, en nuestra pequeña escena se ha dado un sonido particular diferenciado y bueno, nunca formamos parte demasiado clara de ninguna escena de las que suceden alrededor.
Siempre estuvimos como en la nuestra, construyendo nuestro camino, nuestro público, nuestro sonido, así que puede ser.
Teniendo en cuenta de que ‘Dogmas’ se lanzó el 2021, ¿cuándo empezaron a componer y a trabajar en su disco ‘Artificial’?
Lucio: A principios del año pasado empezamos a trabajar en Artificial, es un disco que nació de gira en gira. Teníamos esa urgencia de componer un disco, lo compusimos en dos semanas, en el estudio de un amigo en La Plata y con un solo ventilador.
Marco: Pobre ventilador que fue sobreexigido.
¿Creen que este este disco tiene algunas influencias tal vez nacionales como internacionales?
Lucio: Sí, tal vez no un artista en particular, pero en este disco, nos permitimos jugar mucho con los sonidos, más que en otros y hay un poco de influencia de la electrónica del 2000; como el tipo de sonoridades, cómo entran y cómo se van.
Después escuchamos mucha música, esa es la verdad, escuchamos música que no nos gusta, estamos todo el tiempo tratando de absorber nuestro entorno, nuestro pasado. Escuchamos mucha música para este disco, las influencias tal vez más claras para dar paisajes sonoros. Hacemos la música que queremos escuchar, que nos gustaría escuchar, entonces hay una instancia de proceso que puede ser evocativa, pero después cuando nos metemos en el tema empezaste a estar al servicio de la canción y ahí se cae todo tipo de exterioridad.
El nombre de Artificial fue lo último que definimos del disco
¿Cuál es el mensaje, el concepto y la intención de Artificial?
Marco: El nombre de Artificial fue lo último que definimos del disco, estaba todo terminado, todas las canciones. Entonces, nos pareció que Artificial era atinado para englobar lo que termina siendo el concepto del disco, no como premisa, sino como consecuencia. Esto trae en discusión lo que nos interesa, que es ese binomio que se planteó mucho tiempo sobre la ejecución de electrónica y el rock, hay una asociación en que la electrónica es una música maquinal, fría, adolescente de emocionalidad, que no tiene humanidad.
A parte, Artificial remite a varios temas, como el de la inteligencia artificial, las problemáticas que eso trae y como impera un discurso medio alarmista de misterios y el avance sobre nuestra vida. Nosotros no nos hallamos en el pánico, es una herramienta nueva y poderosa, que vamos a usarla nosotros.
De hecho, la usamos literalmente para hacer las tapas del disco, entonces, Artificial es una palabra que engloba un montón; el espíritu del disco y la discusión (de la electrónica no tiene porqué ser carente de emocionalidad, no lo es)
También, de que lo demás no es menos artificial, o sea las otras músicas no son menos artificiales que la electrónica, digamos que hasta la más orgánica tiene montón de decisiones tomadas en la composición, producción y grabación, eso es un completo artificio.
Si logra engañarte es porque está bien hecho, pero ese es el objetivo.
¿Cómo fue esta evolución de sonido respecto a su primer disco porque ahora están mucho más en lo electrónico? ¿Cómo fue toda esa evolución y por qué quisieron migrar un poco más a lo electrónico?
Lucio: Como cualquier banda que comienza estábamos escuchando bandas que nos afectaron mucho a la hora de un disco, o sea, cuando hicimos no gracias nuestro primer disco, escuchamos las referencias ahí de lo que escuchábamos en ese momento.
Dos cosas pasaron, una que fuimos a una fiesta electrónica y descubrimos que ahí había un mundo muy vasto del cual desconocíamos totalmente, o sea, que rompió un montón de esquemas propios y formativos nuestros. Rompía la lógica de vitrina que tiene más el rock, la electrónica nos voló la cabeza a sonoramente y eso fue como che, tenemos que tenemos que hacer esto.
Empezamos a tratar de hacer canciones que tengan los primeros elementos que percibimos en la electrónica, bombas negras, ese tipo de cosas. Era la búsqueda de transgredir, jugar con la electrónica desde el rock, cuando antes era mucho más marcada la línea, ese fue el camino que nos fue llevando disco a disco.
Artificial es la profundización de toda la metodología de trabajo que llevamos haciendo a lo largo de los años, es un disco que rompe hacia afuera y busca explotar; es más colorido, un poco más pop. Por otro lado, creo que lo bastante notorio de este disco es que es agresivo, o sea, lo hicimos en dos semanas, entonces eso está en el disco.
El bombo perfecto es el que todavía no encontraste
¿Hay alguna canción de Artificial que crean que refleje bien esta era de esta nueva era de Peces Raros?
Marco: Sería bastante difícil porque justo es un disco que creo cada canción es un poco su mundillo, tiene su discurso, su estética, su relato y cada canción es bastante diferente de la otra.
¿Qué fue lo que más les costó hacer de este disco?
Lucio: Terminarlo, todos nos decían “basta de estar en el estudio».
Marco: Encontrar el kick suele ser una tarea casi interminable, el bombo perfecto es el que todavía no encontraste, siempre. Nos gusta disponer del tiempo para producir y para cambiar lo que haya que cambiar, darnos un tiempo para escuchar lo que hicimos la semana pasada del estudio y de repente decís “che me dio esta sensación”.
Necesitamos ese tiempo largo y tranquilo de hacer escuchas y poder jugar, eso nos suele tomar un año y medio.
Lucio: Nos toma mucho tiempo, también porque parte de nuestra identidad está en lo sonoro, no solo en las canciones y las decisiones sonoras toman mucho más tiempo de hallarlas que la arquitectura de la canción.
¿Hay alguna nueva tecnología que hayan implementado en este disco que no sabían usar antes o que nunca la habían usado
Marco: Creo que sí, o sea, en cada disco que lo hacemos cada dos o tres, llegamos al estudio y aparecieron un montón de plug ins o en nuestros instrumentos virtuales.
Hubo un tema que imaginábamos que la voz iba con vocoder, que es un instrumento viejo y ahora adquirió una multiplicidad de emulaciones digitales, es como pasar la voz por un sintetizador y suena como un robot viste.
Nos costó bastante trabajo hacerlo funcionar, porque no lo manejamos del todo y tiene sus complejidades.
Y bueno, la inteligencia artificial para hacer la tapa, dado el concepto del disco y algo de la estética que viene de la IA la hora de hacer imágenes, ya se genera una estética, trabajamos con una foto original, pero esa foto está super procesada con IA.
¿Cómo manejan la transición de sus canciones electrónicas del estudio y de sintetizadores al escenario ?
Lucio: Se hace muy distinto, porque el estudio es el estudio y el vivo es el vivo, porque nosotros hacemos todo en Dj Set, sin parar. Entonces a la hora de incorporar una canción tenemos que tener en cuenta un montón de cosas: la velocidad, el pulso, el tempo, tonalidad.
Por eso, el 99% de las veces tenemos que modificar la canción para que entre en vivo, es un proceso súper divertido porque, para nosotros la sala es un laboratorio y vivimos dentro de la sala. En ese lugar es donde nosotros ponemos gran parte de nuestra creatividad, los vivos para nosotros son súper importantes y cuando las canciones van al vivo son otra cosa, ves la reacción de la gente, cómo lo recepciona y si funciona en ese momento del show.
¿Qué canciones de este álbum les hubiese gustado presentar interpretar cuando vinieron en Chile?
Algunas las tocamos, como “Desaparecer» y “Óxido” son dos canciones que fueron cortes y tuvimos la suerte de poder tocarlas. Ahora estamos tocando dos más, “Nada para siempre”, “Artificial” y “Frecuencias”. Creo que esas son las canciones que vamos a tocar la próxima vez que vengamos acá, que esperamos no sea dentro de mucho, tal vez en octubre y seguramente si no es en octubre seguro el año que viene.