Pascuala Ilabaca, la artista residente de Valparaíso culminó su gira por Estados Unidos a lo grande. Pasado unos días estrenó el sencillo «El Perdón» junto a su par porteña Mon Laferte, bajo el sello de Warner Music. La cantautora y acordeonista, ha llevado la Chile en varias ocasiones. Con 23 giras internacionales alrededor América Latina, EE.UU y en Europa.
En Expectador conversamos junto a ella sobre su trayectoria y su single recientemente estrenado.
Sobre las audiencias
Me comentabas acerca de tus giras por el mundo ¿Has notado diferencias de público en regiones?
Cuándo estaba en la universidad, muchos de los profesores me hablaban de una cosa que se llamaba «la crisis de la identidad chilena», y yo pensaba, con esto es como que tenemos una crisis identitaria, que no sabemos cuál es nuestra identidad, que somos apagados, que somos grises, que somos aquí, somos allá. Entonces yo pensaba, este problema se lo inventaron en Santiago.
Yo he viajado por distintas ciudades de Chile, y es evidente la identidad local. Yo no me imagino esa crisis. La vida desde región se siente distinta, se siente distinta en esto en esta autoconciencia de identidad, que a mí me estimuló a querer armar un espectáculo donde yo muestre esto.
Y en torno a las energías ¿son las mismas?
No podría generalizar, que también los contextos lo hacen muy distinto. Por ejemplo, existe gente que a veces necesita más drogas para desinhibirse, o a veces la gente en un teatro muy elegante se siente demasiado solemne y se recata.
No es lo mismo hacer un concierto en la Bahía Chinchorro, donde toda la gente va a carretear a la playa en la noche. Es como otra invitación, depende también mucho de esos contextos.
La gira por Estados Unidos de Pascuala Ilabaca
Hace un rato me comentaste respecto a tu última gira ¿Qué tal el recibimiento?
¡Estuvo muy bacán! Me di cuenta que me gustó mucho el público de regiones. Cuando a ti te cuesta tener cultura, a veces la valoras más. Estuve por Chicago, Nueva York, que son ciudades como atiborradas de escena musical, pero en pueblos como Eugene, Oregón, etc. me encantó el público.
Cada persona se quedó para decirme en qué parte del concierto había llorado, o me daban las gracias por venir hasta acá. Me decían «no recibimos conciertos como este nunca en nuestro pueblo». Compraron caleta de discos y de pañuelos que andábamos vendiendo y no lo podíamos creer. En un pueblo muy chiquitito, hicimos un concierto para 50 personas y vendimos como 70 discos.
No es la primera vez que vas a tocar fuera del país
He hecho 24 giras internacionales con mi banda desde el 2011. Nosotros teníamos una personalidad con la banda muy así, como mochilera… nos encantaba viajar muy aperrados.
Las primeras giras las armábamos muy a lo «gitano». Por ejemplo, a un hostal ofrecimos a cambio conciertos por hospedaje, y vamos armando así los tours. También nos contactó un manager español y él nos ofreció ir a la primera gira por Europa. Fue de dos meses, o sea, muy largo, habían conciertos que iban saliendo en el momento.
Pascuala Ilabaca por el mundo
A raíz de todos estos viajes, has reflejado esto en tus propias canciones. Cuéntame acerca del reciente vals que lanzaste junto a Mon Laferte
Sí, en Valparaíso el vals peruano se ha ido impregnando la cultura, tanto así que, La Joya del Pacífico ya es como un vals porteño, pero viene del vals peruano sin duda. Justamente la forma en que se grabó siento yo que está muy inspirada en el baile peruano.
El Yayo, que es uno de los guitarristas que está en la en la banda, él acaba de titularse, y su tesis se trataba sobre los trío de guitarra que habían en Chile en los años 30-40 y 50 hasta la dictadura. Había una cultura tradicional en Chile de trios de guitarra, que después se perdió desde la dictadura, entonces es algo muy propio, pero también con esta cosa chilena, como esta crisis de la identidad y lo que hemos hablado se desconoce como propio.
Pero en Valparaíso el vals es algo propio yo creo, y que por eso también era el tema favorito de Mon cuando nos conocimos, y nos declaramos los amores. Si ella es de Viña… el vals era algo muy propio pa’ ella también. Cuando eres niña y ves en qué momento los adultos se emocionan y se quiebran, y se caen esas máscaras y esos roles porque están todos expuestos, vulnerables y emocionados. Eso, yo creo, que me impacta del vals.
Lo que se espera a futuro
Esta canción me imagino que es un adelanto para algo más grande ¿Existirá algún otro sonido en este futuro disco?
Este disco, yo lo empecé a gestar en la pandemia y se trata todo sobre los ritmos que se dan en Valparaíso, se trata sobre la ciudad de Valparaíso. Es el único proyecto que hago donde te estoy diciendo que soy porteña. Hay una pata de cueca y boleros.
Me imagino que habrán más artistas porteños
Sí, sí, sí, claro. Es la oportunidad de poder invitar a gente que uno ha visto, gente que siempre toca en un parque a ti te gusta, pueden invitarla.
El disco está como repartido un poco entre lo que grabé con la banda del trío de guitarra, que es todo más pulcro. Lo que grabé con mi banda (Fauna), dejé a un Valparaíso más guachaca, más bohemio.
Es como ¿plasmar a la ciudad en estos últimos 10 años?
No sé, siento que Valparaíso es inasible en el sentido de que es muy diverso. Alguien podría inspirarse y hacer un disco de electrónica, porque también hay un montón de rave. Entonces, este proyecto es cómo a mí me ha inspirado Valparaíso para hacer la música que hago, algo más personal, no como con la pretensión de crear una postal acerca de qué es Valparaíso… me explica más a mí.
