Escrito por Consuelo Cruzat
Fotos por Andie Borie
A la luz de luna aparecen los vampiros, el público se viste de negro y se lucen los mejores maquillajes y peinados setenteros en la velada del 16 de junio en Club Chocolate. Con un recinto completo, a las 9 de la noche The Sisters of Mercy comienza a dar su show en el país.
Como acto de apertura estuvo Temple Solar, motivando el ambiente con su propuesta de post-punk, la que motivó ciertos bailes y movimientos del público, alargando incluso su set con una canción. Una buena previa al show principal.
Un solo riff de guitarra bastó para que el público comenzara a bailar y corear las canciones de la banda, todos muy fanáticos y emocionados por escuchar al icónico Andrew Eldritch y su banda de compañía, que a pesar de no ser miembros originales, destacaban por tener el estilo, actitud y ritmo digno de la cultura gótica. Los guitarristas interactuaban de vez en cuando con el público, uno bajaba del escenario y regalaba uñetas, lo que mantenía una euforia dentro de las primeras filas. Mientras tanto, Eldritch bajo una capucha negra con sus lentes de sol históricos, posaba para que la gente lo admirara.
Tocaron éxito tras éxito. No pasaron ni 10 minutos y ya comenzaban a sonar las canciones ícono de su carrera musical, como lo son «Alice» y «Dominion/Mother Russia», temas que fueron cantados de principio a fin por la fanaticada del grupo causando mucho entusiasmo dentro del lugar.
La duración del show fue perfecta, lograron presentar varias canciones de sus tres álbumes de estudio: First and Last and Always (1985), Floodland (1987) y Vision Thing (1990). Presentaron un encore para tocar una triada que cerró de manera culmine el repertorio, donde la elección de temas fue «Lucretia My Reflection», «Temple of Love» y «This Corrosion», las más escuchadas estadísticamente de la banda que finalmente dejó muy satisfechos y contentos a los espectadores del show.
A pesar de ser una de las bandas elementales del rock gótico, se les dio un espacio pequeño para presentar. Esto se vio demostrado en la cantidad de personas que habían, donde ya no quedaba más capacidad e incluso se vieron muchas caídas por la poca movilidad que existía para transitar. Aún así no fue impedimento para levantarse y continuar cabeceando los grandes temas que se presentaron.
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