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La cálida y caótica intimidad de Niñopolar

Concepción. Cuna de cuanto acto musical exista en nuestro país. Reflejo de todo tipo de transacciones musicales con raíces tanto fuera como dentro del territorio, inmaculado un registro único que lo dota de cierto misticismo. Dicen que uno agarra una piedra y sale una banda o cantante nuevo, aunque ojo, es como encontrarse 5 lucas tiradas en la calle. Toda una suerte. Teniendo esta panorámica recontra sabida pero que vale la pena repetir una y mil veces, es que les presentó algo así como encontrarse algo más valioso que plata o una típica banda de la zona; una joya a pulir. Hablamos de Niñopolar, que gracias a la magia del Facebook y las patrañas de Mark Zuckerberg, llegó a nuestros oídos y quedamos maravillados.

¿Qué hace tan especial a este Niñopolar? ¿Será su voz? ¿Su música? En lo personal, mi primera impresión fue la de una persona revelando poco a poco, de manera criptica, entre la simpleza y la extrañeza del conjunto de sonidos que componen de manera casi onírica, su Ep Trozos, estrenado el año pasado, sus más recónditos pasajes internos, pensamientos, etc. Es como meterse de manera microscópica dentro del cuerpo del artista y sentir los diversos sonidos que cuajan entre la sangre, los órganos y las células, el alma misma que respira despacio, silenciosa y desafiante. Suena familiar, pero extraño. Me recuerda un poco a Syd Barrett por ejemplo en el tema Efusión, un loco lúcido, que se deja llevar por los estragos que puede provocar la música. Una antesala perfecta a ese latido urgente de experimentación ambiental llamada Feto, track que consigue revelarnos la proeza máxima del otro lado del espejo, sin reglas, en donde todo puede concurrir. Pero Trozos no se silencia tan rápidamente pues al final, nos enseña el silbido mágico de Nebulosa, tal como lo dice el nombre, una canción entre el abismo y la paciencia. Acordes para imaginar.

Pueden escuchar Trozos desde su Bandcamp, seguirlo en Facebook y claro está, hay un soundcloud con otras sorpresas. Niñopolar desde ya tiene toda nuestra atención, apoyo y resistencia.

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