Nos estamos acercando a uno de los estrenos más esperados del año y hablamos de Nosferatu dirigida por Robert Eggers, la cuál tendrá fecha de estreno en nuestro país el 2 de Enero en plena víspera navideña.
No es novedad que esta historia no es original, ya que es un remake de Nosferatu de F.W. Murnau que fue estrenada en Alemania en 1922. Además le sigue la icónica representación del mismo filme dirigido por Werner Herzog en 1979, con las grandes actuaciones de reconocidos actores como Klaus Kinski e Isabelle Adjani.
Sin duda Nosferatu (1922) ha sido una inspiración para diversos artistas desde el momento en que fue lanzada y a pesar de las controversias en las que se ha visto envuelta por temas de derechos de autor, no fue un impedimento para renovar la historia de Drácula y darle un vuelco más tenebroso y oscuro.
Ahora, adentrémonos en los elementos que han posicionado a esta película como de culto y su influencia en el cine de terror.
Pionera en el expresionismo alemán
En los años 1920 en Alemania, ya se estaba explotando un género del cine: el expresionismo. La primera que podríamos reconocer en esta vanguardia, es El Gabinete del Dr. Caligari (1920).
Todo este movimiento surge luego de la Primera Guerra mundial, donde Alemania queda devastada luego de la recesión económica que golpea al país. Con este sentimiento de desolación y negatividad, comienzan a aparecer las películas de terror como un desahogo a todo este sentimiento oscuro que tiene la población alemana.
Nosferatu le sigue al Gabineta del Dr. Caligari y con similitudes en las expresiones de los personajes, ambientación y con el mismo sentimiento negativo universal, se establece como una de las pioneras del cine de terror expresionista en Alemania.
El uso de una bestia como personaje principal
Nosferatu es una reversión de la novela Dracula de Bram Stoker, donde para no tener problemas por derechos de autor, hizo unos pequeños cambios dentro de los nombres, la locación de la historia y cómo se vería principalmente el actor que representaría al vampiro.
Los vampiros estaban más pensados como seres atractivos, que podían encantar a una persona común y corriente con sus cualidades físicas y de habla. Pero en el imaginario de Murnau y con el contexto que se vivía en su país, le hizo más resonancia crear a un ser con deformidades físicas y más cercano a una bestia, que asustara a la audiencia.
La luz como debilidad para los vampiros
Antes de Nosferatu la luz para los vampiros no era un tema, luego de la película se comenzó a agregar a la leyenda que la luz es símbolo de debilidad para estos seres, que les afecta la piel hasta el punto de la muerte.
Este punto lo destacamos porque Murnau logró introducir en las historias de terror un elemento tan importante como la lucha de los vampiros contra la luz del sol, que ha sido un elemento que se replica hasta el día de hoy.
Elementos góticos como recurso ambiental
El conde Nosferatu es un símbolo gótico y todo lo que lo rodea se adapta a ese tipo de simbolismo. Desde las tomas en cementerios, hasta las estructuras arquitectónicas y el uso de la oscuridad y las sombras como recurso ambiental, ha inspirado a diversas creaciones de cine de terror gótico hasta la actualidad.
Sin dudar, antes de ver el estreno de Nosferatu de Eggers es necesario repasar la obra de Murnau, para así poner en comparativa los elementos que se repiten, lo que es novedoso y también para comprender la historia desde su primera aparición en el cine. Recuerda que Nosferatu de Robert Eggers llega a la pantalla grande el próximo 2 de Enero