Por Marina Peñaloza López
Foto por Isidora Blanco
El personaje que se robó el 2023 con el álbum ‘Sorry, Estoy en Mi Darkera’ (2023) y el EP ‘Días Antes de la Darkera’ (2023) no deja de destacar con una carrera en ascenso y hits con un impacto cada vez mayor. Hablamos de Easykid, el líder del Culto, y es que comenzó su primer tour nacional: “Darkera por Siempre”. En su segunda fecha es el turno de Concepción, el encuentro será este sábado 22 de junio en SurActivo, y ojo, que aún queda tiempo para escuchar estos éxitos en vivo y ser parte del Darkera Tour en Conce junto al Culto –consigue tus entradas aquí–.
Sabemos que la música tiene la capacidad única de capturar los momentos más intensos y Easykid sabe cómo hacerlo, es por eso que a continuación desglosamos una selección de sus canciones que, en un orden específico, sacan a la luz la narración de una potente historia de amor.
El enamoramiento:
Es la atracción inicial y los nervios al intentar captar la atención de la persona que te gusta. “Veo tu nombre en lo’ me gusta hizo que me derrita”, “si me das luz verde, de una voy porque tú me tienes crazy, me tienes psycho”.
El esfuerzo por mantener la atención de tu interés amoroso. “De lao’ a lao’ bebe ‘estoy buscándote, subí estado sólo para que me hables. No ha pasado”.
La relación comienza a materializarse, ¡te dieron luz verde! «Me respondió y de una me la llevé. No quiero que esto sea algo pasajero, baby, tú eres el cielo, la única verdadera”.
El sentimiento de que nunca te has sentido así antes que llega con un amor puro y leal. «Y es que nunca me he sentido igual, yo que siempre basurié el amor. Soy tuyo, no importa nada, te quiero mama, mi lovecita, te amo la vida».
El momento de felicidad máxima donde quieren estar juntos contra viento y marea. “Tu de verme siempre puede y quiere, por que sabe yo soy su bebe. Ma si mañana se da voy a comprarte un BMW, tu y yo con nadie más”.
El momento de inflexión:
Surgen problemas en la relación. Te sientes confundido y angustiado, pasando noches sin dormir y haciendo de todo para intentar mantener cerca a esa persona. «Baby, no sé lo que está pasando, no es la droga, eres tú lo que me está matando. Estoy escribiéndote lo que aún no te digo, ya son varias noches las que ni he dormido. Porque siento que mañana no estaremos hablando”.
El triste momento de “darse cuenta” ¿y si no me aman de verdad? ¿y si ya no soy correspondido? «Ya son las 3 am y aún no me has dicho nada. Tú no me quieres, tú no me amas. Solo me dices cosas para que no me vaya. Con otras quiero nada de nada”.
La dolorosa confusión de que a pesar de tus esfuerzos, no estás recibiendo el mismo compromiso y amor. “Má’, si tú supieras que me tienes en la loquera de hace tiempo, de a deberas que yo quiero quedarme pero se hace tarde, pareciera que tú no eres muy sincera, no me quieres, no me pela”.
Un punto crítico, te sientes perdido, no quieres enfrentar la realidad de que las cosas no van bien. “Porque yo sigo aquí pensando en los dos’ quiero quedarme y me dices adiós, ¿Qué es lo que me estás diciendo? esas son tonteras. Solo juegas, tú me quieres de lejos’ y yo pensando en cuántos hijos te dejo”.
Es hora de dejar atrás la relación y deshacerse de los recuerdos que te atan a esa persona (aunque realmente no quieres hacerlo). “Pásame el hoodie del H&M que ya no te vuelvo a ver más, toma la figura de Tanjiro que me diste pa’ navidad. Ya estás casi olvidada, no me acuerdo de nada, sólo de tu culo, de tu pelo y de tu cara, de tus labios, de tu sonrisa y de tu mirada”.
El quiebre:
Esa persona se fue y se llevó todo lo bueno que tenían. «Lo que se da no se quita, y tú te fuiste con todo, ojalá no se repita, no me enamoro más. Tú eres como droga solo abajo quieres verme, en el frío nunca pudiste abrigarme».
Solo tristeza y desilusión, no más palabras. “Dime todo eso que decíamos antes, nada nada es igual, creo que me voy a enfermar. Como rueda de una bicicleta chocando en cuneta”.
Finalmente aceptas que la relación terminó. Te distancias emocionalmente y borras todo rastro para poder seguir adelante. “Ese culo ya me da igual, puede caminar ¿Pa qué voy a dar detalles? Si todo salió mal, todo tiene su final. A esta tumba puse flores. Tu nombre no voy a pronunciar”.
Y sin querer llega la nostalgia, aunque reconoces que ambos lo han superado. “Siendo sincero, ya no es lo mismo empezar de cero. Tú me superas, yo te supero. Apenas logré salir vivo de este castigo”.
¡¿Esa persona quiere volver a tu vida?! Prefieres seguir adelante y dejar atrás el drama. A pesar de la dificultad de olvidar, reconoces que es mejor buscar una vida feliz sin toxicidad. “Ya no quiero drama, ya no quiero ese tumbao, tú eres una de tantas que el camino me ha quitado y ahora me siento mejor, ya se me sanó el dolor”.
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