Seven Kayne en Chile: Nos volvemos locos y emotivos

Escrito por Constanza Machuca
Fotos por Bárbara Hernández

Luego de un intento fallido para visitarnos en 2019, Joaquín Cordovero –mejor conocido como Seven Kayne– finalmente debutó en Chile. Aterrizando en la Sala Metrónomo, el trapero argentino logró una noche recorrida por emociones, alta energía infinita y un enorme cariño con su gente.

Un enérgico comienzo

Presentándose primero en la pantalla una imagen de meditación, fue que la ansiedad de los asistentes ya emocionados –recorriendo distintos artistas de trap argentino en la espera– comenzó a calmarse. Y así, dando comienzo al esperado show, con un enérgico Seven Kayne en el escenario interpretando “Quantum V2”.

De esta forma, el trasandino combinó esta ansiada espera de más de cinco años de su venida a nuestro país para que los fans se volvieran locos. Ruidos ensordecedores acompañaron a Seven Kayne en su visita a Chile, siguiéndolo a través de su repertorio de trap más clásico, con canciones como “Hace Tiempo” y “Atrapado”.

Seven Kayne a través de otros géneros

Siendo parte de su esencia, Seven no sólo se muestra en aspectos musicales a través del trap ‘puro’ de Argentina, sino también recorriendo otros géneros, los cuales lo apoyan a través de la emocionalidad de sus letras. Uno de los ejemplos de esto es en la canción “Bien X Vos”, uno de sus últimos proyectos, componiéndose también de pop punk moderno. Así, el argentino logra conectar desde distintas aristas musicales a sus fans con aquellas letras más edgy.

Esto también se repite en la canción “Cerca de Ti”, mucho más pop, o también en un bloque de canciones emocionales y compuestas de baladas. Canciones como “No Me Dejes Ir”, “Dame Love” y “Una Semana” se hicieron presentes, incitando a todos a bailar en una perspectiva calmada –en contraste al resto de su repertorio–, y donde Seven Kayne expuso no sólo su lado más vulnerable lírica e instrumentalmente, sino también a nivel vocal, dejando al desnudo su amplio rango vocal ante una audiencia que lo ovacionó luego de tal expresión.

Sumado a esta desnudez, Seven dio paso a la canción que, en sus palabras, fue la más pedida: “Ordené Mi Cuarto”, en conjunto de nada más que su guitarra y su voz. Luego cerró el bloque emotivo con la reconocida “Golden Hour”, remix de la canción de JVKE, en una versión en español totalmente vulnerable, y dejándole en claro en palabras a los fans chilenos que éste había sido uno de los mejores shows en su vida.

La hora del pogo

‘Se terminan los acústicos’ fueron las palabras del argentino antes de comenzar la locura, comenzando la pista de “Todas Iguales” y una inmensidad de gritos que la reconocieron desde el primer sonido.

Esta energía no cesó, llegando al peak del pogo en “Fortuna y Fama”. Así, Seven Kayne invitó a todos los asistentes a hacer un círculo gigante previo al comienzo de la canción, esperando que ‘se arme un quilombo’. Así fue, no una, no dos, sino tres veces en la misma canción. Y cuando no se podía ver nada más cercano y enérgico, el argentino invita a cantar al escenario a uno de sus fanáticos durante “TAMOS OKEY”, apoderándose del protagonismo.

Avisando que se acercaba ya el final del show de Seven Kayne en Chile, el artista interpretó la icónica “BZRP Music Sessions: #33”, uno de los clásicos del trap argentino y que evidentemente fue una eufórica experiencia para los fans.

Finalmente, luego de distintos avisos de que serían las últimas canciones, el argentino cerró su show con las canciones “Bésame”, “Buenos Aires” y “Sé Que No”, ganándose una infinidad de cariño y sentimientos encontrados con sus fans de forma recíproca. Recorriendo no sólo su amplio repertorio para sus años de carrera, sino también un catálogo de emociones y euforia, el argentino se fue no sin antes prometer un retorno tras la fuerte cercanía sentida con el público chileno.