Escrito por Juan Pablo Ossandón
Fotos por María Paz Carrasco
Una de los nombres más únicos y particulares de esta versión de REC fue AKRIILA, uno de los pocos nombres urbanos que compusieron el cartel del festival penquista este 2023. Pero no es casualidad que la oriunda de Maipú se haya hecho un lugar en este evento, ya que sus hordas de fans cada vez más numerosos pedían y pedían a gritos su presencia en el line up.
Con el excelente 2023 que ha tenido la Akri, tras exitosas presentaciones en Espacio del Ángel, Histerya Colectiva y una comentada Súbela Session, el público se agolpó en la noche en el escenario Llacolén, soportando el frío del río situado inmediatamente a la izquierda, para que los bajos compromidos y estruendosos hicieran vibrar las cajas toráxicas de todo el mundo.
Llega a ser ridículo como, en el en vivo, las canciones de la trapper se sienten a un nivel corporal, no sólo por su interpretación cercana a las nociones rage del género con temas como «AKRI TU ERE UN XULO» y «ANTICUECA», desatando la euforia en una audiencia que se vio aún más aleonada con la helada lluvia que breve pero fuerte, cayó durante la presentación de AKRIILA.
«Sé que esto es Rock en Conce, pero bueno, yo no toco rock«.– dijo Fernanda Sepúlveda, el nombre real tras el velo de AKRIILA, quien sacó una tras otro sus hitazos como «XEKERAU», «MARILÚ», «BLUE V2», ante un público que veía deslumbrado como los rojos intensos pintaban todo el panorama, con la estrella ya icónica al medio del escenario, y una Akri dominando con nada más que su actitud.
De esta forma, y con el frenesí impasible de «MONA XINA», la presentación breve de la artista llegó a su fin instalándose como un hito de su despegue en la escena. Un viaje que no ve límite alguno, y que, paso a paso, seguirá entregando palos que bacilar el día de hoy y mañana.
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