En el mundo de la música existen artistas un tanto fantasmas, que han aportado desde diversas labores ligadas a la producción, al desarrollo y evolución de la música. Desde Arca, pasando por Kaytranada, Butch Vig o Brian Eno, cerebros tras obras de su propia autoría o puntos de inflexión para álbumes de otros músicos, se han hecho un lugar dentro de ciertos círculos, más no así en el mainstream mismo, siendo parte fundamental de este. Es el caso de Mark Ronson, nombre que quizás han visto los últimos años en todo tipo de medios pero que tal vez no sepan con exactitud de donde viene y cual es su importancia.
Nacido en Londres, el productor y músico de 42 años ha sido el encargado de dar vida al vuelco sonoro que se traía Josh Homme y sus Queens of the Stone Age para su último disco Villains. No por nada el sonido y la variedad de géneros e influencias de aquel trabajo, pues es precisamente el aporte de Ronson dentro de lo que el propio Homme definió como un talisman. Pero no es lo único. Mark ha cosechado por más de 15 años, una cantidad impresionante de trabajos, siendo algunos de estos, verdaderos bombazos y grandes obras musicales.
Entre sus aportes, están los cuatro álbumes de estudio que ha lanzado titulados Here Come The Fuzz, Version, Record Collection y Uptown Special, para los cuales han participado nombres que van desde Bruno Mars a Sean Paul. El primero del año 2003, trajo consigo un sonido más cercano al Hip Hop alternativo con colaboraciones de Raperos como el ya mencionado Sean Paul, Q-Tip, o Nate Dogg. El gran salto solista lo dio con Version, segundo trabajo del año 2007 que incluía el superhit Valerie junto a Amy Winehouse, aparte de otros temas que contaron con colaboradores de la talla de Robbie Williams, Kasabian, Ol’ Dirty Bastard o la recién mencionada Amy. Su tercer disco apareció el 2010 y diversificó su paleta de géneros, añadiendo a los ya explorados en sus obras previas, el Synth Pop o New Wave, siendo Boy George, Ghostface Killah o D’Angelo parte de los músicos invitados. Finalmente Uptown Special aterrizó el 2015, esta vez con un hyperhit como Uptown Funk junto a Bruno Mars. Esta canción, ganadora del Grammy por grabación del año, hizo de Ronson merecedor de un estatus elevado dentro de la industria. Otros artistas que participaron del LP fueron Kevin Parker de Tame Impala y Mystikal.
Junto al ya mencionado Villians de los QOTSA, existen otros álbumes que han llevado el sello Ronson dentro de su producción. Remontándonos a comienzos de milenio, el Británico comenzaba a dejar su huella en trabajos de Raperos como Ol’ Dirty Bastard (Osirus) y Sean Paul (Dutty Rock), entre otros más. Para el año 2006 sería parte del debut de Lily Allen titulado Alright, Still, produciendo el tema Littlest Things, en el Back To Basics de Christina Aguilera, dejando su granito de arena en Slow Down Baby, añadiendo en su curriculum el Rudebox de Robbie Williams con Lovelight, incluso haciendo lo suyo en More Fish de Ghostface Killah. Pero el gran reconocimiento se lo llevó al ser co-productor del Back To Black de Amy Winehouse junto a Salaam Remi, colaborando en canciones como Rehab, Back To Black, Love Is A Losing Game o You Know I’m No Good.
Dentro del listado de producciones a su haber, encontramos su aporte en los discos 19 y 25 de Adele, Sol-Angel and the Hadley St. Dreams de Solange Knowles (hermana de Beyoncé), All You Need Is Now y Paper Gods de Duran Duran, New de Paul McCartney, Off with Their Heads de Kaiser Chiefs, The Renaissance de Q-Tip, Joanne de Lady Gaga o Unorthodox Jukebox de Bruno Mars, entre muchos más. Cada uno de estos, forma parte del imaginario nato de un moldeador íntegro de todo tipo de géneros musicales, los cuales de una manera u otra, logran adecuarse al contexto histórico y conceptual de variados artistas y bandas. Es ahí la gracia de un productor como Mark Ronson, quien ha logrado ver por el espejo retrovisor de sus secuaces y les ha dado un nuevo impulso creativo y sonoro. Homme lo supo. Winehouse lo supo.
Felipe León
