Hay algo que suena familiar en lo que nos cuenta Martín Pérez Roa en su recién estrenado mixtape Quédate en mi casa, aparecido hace solo algunas horas y que se nos presenta desde un sonido casero lo-fi desdibujado por una narrativa de ensueño. El carácter universal desarrollado en la obra nos muestra al artista dueño de un pequeño gran secreto dispuesto a explotar en nuestras mentes, vibrando desde esas líricas cercanas que se ven entre mezcladas por esa vocación de productor y cantautor impulsado por su alterego Winamp.
Sobre el álbum el músico nos comenta: «en términos de influencia creo que es una mezcla de Blood Orange y King Krule. Está hecho con lo que tengo a mano (por suerte tengo el estudio en mi casa) así que creo que eso influyó un montón en el sonido del disco. Respecto a cómo nace, fue un ejercicio de hacer algo para Winamp aprovechando que tenía más tiempo libre debido a la baja de pega en la primeras semanas de cuarentena. Agarré pedazos de canciones, acordes, letras y reproduje todo para tratar de hacer algo que quería hacer hace tiempo: un disco con hartos pasajes, canciones cortas, muchas texturas, lo más «actual posible» yo sé que no soy un cabro de 20 ya y cada vez me cuesta seguir más el hilo de a donde está la música «pop» así que me he refugiado en seguir ciertos artistxs para cachar más o menos en qué está la cosa en el mundo de las canciones.»
En medio de la pandemia y todo lo que ha provocado en el ritmo de trabajo musical y personal, Martin reflexiona al respecto: «Me cuesta decir algo que no se haya dicho, está bien compleja la actualidad para nuestro país y siento que seguirá complicándose si es que los soretes que tenemos por gobierno no se ponen los pantalones por la gente y no por la plata. Para muchxs músicxs siempre ha sido una vida compleja, pero ahora sin poder hacer presentaciones en vivo para muchas personas, incluyendo técnicxs, visualistxs se acabó en gran medida la pega y yo creo que por un rato las cosas no serán las mismas. Espero, viendo el vaso medio lleno, que la ausencia de eventos masivos con artistas internacionales se termine por convertir en una invitación a consumir arte hecho en Chile y Latinoamérica.
A mi, personalmente, como músico todo lo que hemos vivido en los últimos meses me han dado la energía para no quedarme callado frente a las cosas que me molestan y al mismo tiempo mis relaciones con las personas que quiero se han vuelto más intensas, siento que tengo las emociones a flor de piel. Me estoy cuidando mucho del corona porque soy asmático y no me gustaría morirme ahora, quiero seguir haciendo mucha música.
No quisimos perdernos la oportunidad de preguntarle sobre los nuevos sonidos que ha estado escuchando este último tiempo, a lo que nos dijo: «Estoy escuchando constantemente música nueva en bandcamp o soundcloud, estoy investigando músicas electrónicas actuales, ligadas al club que se salen de los márgenes del techno y del house, que son más ligados a las percusiones. Soy mega fan de DJ Python, sacó un disco hace poco que está bellísimo, de DJ Plead, Overmono, Octo Octa, Ciel, Yaeji.
Bandas no he escuchado mucho últimamente, pero si estoy poniéndole oreja al último disco de Buscabulla, al último de Nick Hakim, me volví a encontrar con el primer lp de Factory Floor y espero con ansias lo nuevo de Jessy Lanza.»
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