Escrito por: Bárbara Conejero
Fue en 1922 cuando el cineasta alemán Frederich Wilhelm Murnau realizó la primera versión de Nosferatu, inspirada en la novela de Drácula, de Bram Stoker. Con un vampiro calvo y de físico espigado, Murnau instaló con su décima cinta las bases para el cine del terror.
Pero no todo fue tan sencillo, pues el director alemán realizó la adaptación sin tener los derechos de autor de Stoker, cuestión que dejó envuelta a la obra en una polémica, que lo llevó a cambiar el nombre del vampiro a Nosferatu, que significa “No muerto” o “Portador de plagas”.
En 1979, cincuenta y siete años después, el alemán Werner Herzog realizó una nueva versión de Nosferatu, con Klaus Kinski en el rol de vampiro e Isabel Adjani como la mujer con la que entabla una misteriosa relación.
Ahora la nueva versión de Nosferatu, a cargo de Robert Eggers, traerá al depredador no muerto nuevamente a la gran pantalla con Bill Skarsgard como el Conde Orlok, Lily Rose-Depp como Ellen Hutter y Nicholas Hoult como Thomas Hutter. La producción también cuenta con la participación de Aaron Taylor-Johnson, Willem Dafoe, Emma Corrin, Ralph Ineson y Simon McBurney.
La cinta se estrenó en cines chilenos el 2 de enero, pero para que vayas impregnándote en la atmósfera de terror, te dejamos algunas curiosidades respecto a esta nueva adaptación.
Una década en gestación
El director estadounidense Robert Eggers, viene planificando esta adaptación hace más de diez años. En un principio, Eggers había anunciado la participación de Anya Taylor- Joy como la protagonista femenina de Nosferatu, Ellen Hutter. Sin embargo, la adaptación de la novela de Stoker sufrió un retraso al Eggers enfocarse en sus otros proyectos, The Lighthouse y The Northman.
Cuando finalmente se empezó a desarrollar la película, se anunció que Anya Taylor-Joy había abandonado la nueva versión de Nosferatu. En su lugar, el papel de Ellen Hutter lo interpretaría Lily-Rose Depp. Si bien nunca se reveló por qué Taylor-Joy decidió abandonar el proyecto, muchos señalan que tendría que ver con su aparición en franquicias como Dune y Mad Max.
Pero Anya Taylor- Joy no fue la única que abandonó la producción de este remake. Cuando la película todavía contaba con la participación de la actriz argentina, Harry Styles iba a interpretar el papel de Hutter , quien, en Nosferatu original de 1922, es enviado a visitar un castillo remoto que pertenece al vampiro Conde Orlok. El exintegrante de One Direction declaró abandonar el proyecto por problemas de agenda.
El renacimiento de Nosferatu para un público moderno
Aunque las versiones anteriores de Nosferatu se han centrado en Thomas Hutter, lo que ocupa el lugar central de esta cinta es el intenso e inusual vínculo entre Ellen y Orlok.
La sexualidad desde la dimensión femenina es central en la obra del director y guionista estadounidense, Eggers señaló haber reescrito la visión del monstruo chupasangre, destacando conceptos como el deseo y la vergüenza.
La visión creativa de Eggers
Mientras Robert Eggers soñaba con realizar la adaptación de una de sus historias favoritas, él mismo se estaba abriendo paso al producir cintas como The Witch y The Lighthouse. Fue la experiencia adquirida en la realización de estas, lo que le permitió posicionarse como uno de los directores del cine del terror moderno más aclamados.
Su meticuloso trabajo en recrear las distintas épocas siendo lo más fiel a la realidad es lo que lo destaca, y Nosferatu no fue la excepción. Grabando en medio de la montaña o al lado de un río, Eggers señaló que ponía música de terror para sumergir a los actores en un ambiente tenebroso que emulara también la época contemporánea a la Primera Guerra Mundial.
Su obsesión por obtener ambientaciones lo más terroríficamente realistas, lo llevaron a usar un total de 5.000 ratas durante el rodaje.
Una víspera navideña distinta
Aunque la cinta se estrena en cines chilenos el 2 de enero, días después de las fiestas, en la mayoría de los países tendrá su estreno el próximo 25 de diciembre, en plena víspera navideña. Si bien se podría pensar que esta es una decisión arriesgada, la estrategia subyace en el creciente interés por contenido más adulto en una temporada tradicionalmente dominada por comedias y películas familiares.
Esta decisión es, de hecho, una estrategia de marketing, pues mientras que la mayoría de las películas de terror se estrenan entre septiembre y octubre, el posicionar una cinta de este estilo al recién finalizar la temporada navideña permite que las películas de este género puedan diferenciarse fácilmente de la competencia.
Cuando el horror traspasa la pantalla
Junto con el regreso de Nosferatu a través de la nueva cinta de Eggers, vuelve a la palestra una vieja pregunta que ha perseguido a los fanáticos del género del terror: ¿cómo huele un vampiro?
Esta vez, el fundador de Heretic Parfum, Douglas Little, ha creado la fórmula para oler como Drácula.
La nueva película de Nosferatu ha inspirado una nueva fragancia que tiene como objetivo evocar el aroma de los espacios oscuros, posiblemente malolientes, habitados por el propio Conde Orlok. Apodada “Eau de macabre”, el perfume captura el olor del ser eterno con “notas de salida de lila y semilla de ambreta que caen en un acorde de corazón de violeta, raíz de lirio y petricor”, según señala Douglas Little.
Apodado con el mismo nombre de la cinta, el perfume Nosferatu lleva grabado el sello del conde Orlok y cuesta 125 dólares por un frasco de 30 ml.
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