Escrito por Juan Pablo Ossandón
Fotos por Joss Moisan
A 5 años de su última visita al país en dos recordadas fechas en Teatro Caupolicán, los británicos Keane finalmente concretaron su show de retorno en Chile ante un Movistar Arena que fue testigo de la celebración de las dos décadas de aniversario de ‘Hopes and Fears’, y muchísimo más entremedio. Desde ya estamos ante el mejor concierto que hayan brindado Tom Chaplin y los suyos en nuestro país a la fecha.
El inicio del show
Con un telón a sus espaldas con un vistazo de Londres y la Catedral de St. Paul, la llegada de Tom Chaplin –con la bandera de Chile propinada por el fanclub–, Tim Rice-Oxley, Richard Hughes y Jesse Quin fue recibida con una estruendosa ovación de parte del público. Misma energía con la que el Movistar Arena se desbordó en emociones con «Can’t Stop Now», dando inicio a una jornada de un poco más de dos horas de calidez.
Asimismo, en tempranas etapas del recital los músicos en escena ya se encontraban interpretando clásicos como «Bend and Break», tema del ‘Hopes and Fears’ (2004) que puso a cada asistente de la audiencia a sacar todo un vozarrón para corear cada verso y estribillo. Y es que de eso se trata en un concierto de Keane, uno en que las interpretación están en punto y llenas de vida –la madurez parece sólo mejorar sus presentaciones–, con un sonido cristalino y vibrante, en el que cada instante se sostiene como un recuerdo especial que resuena en cada quien de forma única. Así sea con una devastadora canción como «Your Eyes Open», o una con colores más luminosos y sumamente entretenida como «Spiralling».
Público protagonista
Los mejores shows, los más recordados, son aquellos en que no sólo el artista o banda en cuestión están entregando una presentación soberbia –que era algo garantizado con los británicos, y que, bueno, así fue efectivamente–, sino también en que la audiencia es participativa y expresiva. Una con asistentes que reaccionan ante lo que sucede, se emocionan y responden sin resquemores formando una experiencia colectiva sumamente cándida. Definitivamente ese fue el caso ayer en show de Keane en Chile.
Así, y con un Tom Chaplin mencionando con una sonrisa en su rostro «cada vez hay más de ustedes» –aludiendo al repleto recinto– y preguntando a los asistentes como se traducía snowing al español, llega «Sunshine», momento en el que el público entregó una postal encantadora a los músicos en escena, sacando sus celulares para formar un mar de luces que brillaba por sobre todo en el coro «can anybody find their home?«. Caso similar se dio con «The Way I Feel«, en el que el fan action era levantar las luces telefónicas al ritmo de la canción, teniendo a los músicos visiblemente sorprendidos mientras interpretaban esta pieza.
El vocalista de la banda nos lo hizo saber. «Ustedes son muy impresionantes«, dijo, destacando tanto los aplausos, el baile y el canto de la audiencia, con especial mención a lo sucedido anteriormente. «Jamás hemos visto algo como eso«, refiriéndose a la «iluminación rítmica con linternas«. Se notaba que el ambiente en el recinto era increíble, y el mismo Chaplin aprovechó ahora de hacer cantar las melodías vocales icónicas de «You Are Young» previo a la interpretación de la misma, instante que salió de maravillas dejando un océano de voces que, genuinamente, daba escalofríos de la emoción.
Más éxitos y momentos
Acto seguido, el himno generacional «Everybody’s Changing» hizo notar el coro más fuerte del público hasta el momento. Se palpaba en el aire que se trataba de una canción con la que muchos crecieron, lloraron, y forjaron recuerdos a lo largo de sus vidas. Cabe destacar que la voz de Tom sonaba espectacular, como si el paso del tiempo sólo mejorara su técnica e interpretación. Algo que se notó de forma especial en «Hamburg Song», en la que interpretó en teclado y en solitud en el escenario, siendo uno de los tantos momentos especialmente emotivos del concierto.
De esta forma, nuestras memorias seguían recolectando momentos gracias a los músicos, tales como el duelo de teclados entre Tim Rice-Oxley y Tom Chaplin –increíble diálogo avivado por el hecho de que son amigos desde la infancia–; la caída del telón en «Is It Any Wonder?» develando una parrilla de luces de ensueño que le dieron un toque especial a dicha pieza; o bien, un instante sumamente especial en el que Keane interpretó la primera canción que compusieron para su debut, aquella que les dio la confianza para decir «tenemos algo grande entre manos«, y que hizo derramar lágrimas a muchísimos, «She Has No Time».
Lo que estaba por venir eran nada más que éxitos. «This Is The Last Time» y «Crystal Ball» hicieron cantar con fuerza al público chileno, el cual estaba sencillamente inundado en dicha y júbilo, emociones que fueron el condimento especial de una velada para la posteridad. Los mismos Keane lo sabían, y es que si bien soñaban en grande en sus inicios, jamás pensaron «en soñar así de grande«, como dejaron claras las palabras del vocalista de la banda. Con esa profunda cercanía y dedicatoria directa a sus fans chilenos, dejan caer una de las más esperadas de la noche, «Somewhere Only We Know«, la cual fue coreada desaforadamente por el público del Movistar Arena –y hasta tuvimos un verso completo a capella–. Simplemente precioso.
El final de Keane en Chile
El último acto de los británicos siguió entregando todo tipo de recuerdos motivados por el agradecimiento que sentían los músicos con la audiencia. Una que volvió a sorprender en «Neon River» con un fan action espontáneo al iluminar el recinto de forma rítmica nuevamente. De ahí que el florecimiento de emociones tras «We Might As Well Be Strangers» y «Sovereign Light Café» era burbujeante, y es que a lo largo del show, era casi común ver a personas visiblemente conmocionadas por las letras y recuerdos que albergan estas piezas –se vio al mismo Chaplin tomándose un respiro, como si estuviese a punto de llorar–.
De ahí que llegaron verdaderos regalos como el b-side «Snowed Under», el cual no estaba contemplado en el setlist y fue a pedido de un fan, o el cover de «Under Pressure», excelentemente interpretado, que parecía toda una celebración al amor –con sus altos y bajos– y que fue cantada con el mismo espíritu jovial que Queen y David Bowie depositaron originalmente en este tema.
Tras un último agradecimiento al recibimiento y calidez del público chileno, los británicos se despiden con «Bedshaped», un último estallido de emociones y sensaciones que dio cierre a una velada que será recordada por siempre como el mejor show de Keane en Chile. Es que el recorrido de estas canciones caló profundo, en especial las de ‘Hopes and Fears‘, y es que no miento al decir que es uno de los públicos más transversales en términos de edad que haya visto, muestra vívida de la importancia de la agrupación.
Con tamaña celebración a la vulnerabilidad, al compartir colectivamente los dolores del desamor, no es descabellado decir que cada quien llegó a sus hogares como personas renovadas.
Setlist de Keane en Chile:
- Can’t Stop Now
- Silenced by the Night
- Bend and Break
- Your Eyes Open
- Nothing in My Way
- Spiralling
- Sunshine
- The Way I Feel
- You Are Young
- Everybody’s Changing
- Hamburg Song
- Disconnected
- A Bad Dream
- Perfect Symmetry
- Is It Any Wonder?
- She Has No Time
- This Is the Last Time
- Crystal Ball
- Somewhere Only We Know
- My Shadow
- Neon River
- We Might as Well Be Strangers
- Sovereign Light Café
- Snowed Under (a pedido de un fan)
- Under Pressure (Cover de Queen & David Bowie)
- Bedshaped