Escrito por Jocsán Sánchez
La búsqueda continua de un artista consagrado. Wos deleita al mundo musical con su tercer disco titulado «Descartable», proyecto complejo de comprender, pero bello de escuchar. La unión efímera entre la trayectoria con la novedad, Valentín Oliva adentra a sus oyentes en un nuevo universo alternativo. En las tandas de la gira mundial que está llevando a cabo, el trasandino visitará nuestro país este próximo 16 de agosto en el Movistar Arena, espectáculo que figura con un perfil cinematográfico. Bajo la misma línea, Expectador conversó junto al artista en torno a este proyecto.
En la búsqueda
¿Qué impacto quieres lograr con «Descartable»?
No sé si a priori buscaba dar un impacto, creo que en realidad fui buscando algo que me mueva a mí. En principio, una de las cosas que me propuse era sentir que estaba haciendo algo nuevo, algo distinto, que realmente había una búsqueda diferente en el nuevo material.
Quizá por un momento no aparecía hasta que nos encontramos con el primer track de lo que después fue el álbum, que es Descartable. Y ahí, bueno, con la aparición de eso, empezó a aparecer todo lo demás. Creo que lo primero que busqué fue ese impacto en mí más que en el afuera, esa sensación de decir, bueno, nos sorprendimos a nosotros mismos. Nos pasó haciéndolo con Evlay, que tuvimos esa sensación de escucharnos y como de alguna manera escucharlo de afuera y sintiendo asombro y novedad de nosotros mismos en el hacer. Creo que el impacto es algo que nosotros no podemos controlar ni buscamos que sea de una manera o de otra, creo que la gente lo recibe de maneras muy diversas.
¿Es el disco más experimental que has hecho hasta ahora?
Sí, en realidad es donde más me animé y donde también al ser el tercero, quizás obviamente la experiencia de los anteriores nos dio una base para jugar de otra manera en el estudio. Para construir de manera un poco más arriesgada siendo un poco más a fondo en ciertas cosas. Animándome a soltarme en otras facetas y desafiándonos también, aunque eso siempre lo intentamos.
Creo que este fue un gran desafío desde ese lado y quizá también tiene eso, que puede presentar ciertos desafíos en una primera escucha. Si uno lo agarra así nomás, creo que es un disco que pide una escucha más conectada con el material. Entonces, me parece que es parte también de los discos que siempre me han gustado. Discos que van de a poco entrando la data, y también me gusta que en cada escucha vayan apareciendo cosas nuevas que uno descubre.
Es interesante esta visión de proyecto. Para afuera la gente te etiqueta como un artista urbano, pero también tienes afinidad con otros géneros más alternativos ¿Qué es Wos para tí?
Creo que lo estamos descubriendo, ni siquiera yo mismo sé cómo definirlo y eso es algo que me gusta. Lo estamos construyendo en cada paso, quizá en varios años después me mire para atrás y diga «ah, es esto», pero ahora creo que estamos haciéndolo propio y que no lo podemos poner en un lugar o en otro.
Eso es parte de lo que me gusta vivir a mí en relación al arte, me da una libertad a la hora de entrar al estudio y no sentir la limitación de una definición, de un género o de tener que estar puestos en algún lado. Sí, obviamente creo que se construye una identidad con el tiempo, pero quizás tiene que ver con eso, con la manera de encarar los materiales. Yo creo que eso a veces es raro también y puede quedar gente fuera por lo que quizá no entiende bien en dónde va o te deja fuera de ciertos lugares. Pero me parece interesante no tener que responder a la necesidad en general de todo el mundo en tener que acomodar las cosas en un lugar para sentirse cómodos.
Wos y las colaboraciones
Me llama la atención que esté Natalia Lafourcade, Indio Solari y Dillom ¿por qué ellos?
Los featurings de «Descartable» creo que fueron apareciendo por los temas y ahí me llevó a las personas. Bueno en el caso del Indio, quizás si es algo que en algún momento apareció como una idea, como la posibilidad a partir de conocernos y que en algún momento pueda suceder algo, pero era todo muy en el aire. Hasta que no aparece ese tema, donde uno siente que podría estar la otra persona, no hay nada, pero una vez que aparece ese tema, todo cierra. En Cabezas Cromadas con Dillom, en un momento con Evlay nos miramos y dijimos «Ché, acá Dillom entra perfecto». Obviamente porque lo seguimos previamente, admiramos lo que está haciendo y tenemos un vínculo.
Natalia lo mismo, es una artista que siempre admiré, me parece una de las grandes artistas de Latinoamérica. Entonces, creo que son esos artistas que están como en mi universo, en mi imaginario, y en el momento que aparece esa canción, bueno, conecta. Es ahora y es esto. Va un poco por ahí, creo que son artistas que están yendo justamente por un camino que no sea tan descartable. Que van a dejar una huella grande en la música.
En adición a la pregunta anterior, la colaboración con Santiago Motorizado en el disco «333» de Evlay ¿Es una intención de unir generaciones?
Creo que la colaboración, en este caso con Santi Motorizado fue una propuesta de Evlay. Y a mí me encanta lo que hace Santiago, también es un artista que escucho y que admiro mucho, me parece un capo. Y quizás no lo busqué como una manera de unir, creo que tuvo que ver más con gustos míos. Poder darme esa posibilidad de justamente compartir con artistas que escucho, que disfruto, que me inspiran y demás nada. Es una posibilidad muy linda, así que creo que surgió más desde ese lado, que de una idea de unir algo o de generar algo que al final termina pasando. Se terminan generando puentes pero sin buscarlo especialmente.
Igual me dio esa sensación, me recordé la percusión de Alma Dinamita como referencia a «La Bomba del Tiempo», la banda de tu padre. Digamos como inspiraciones que quieras unir
Es eso como decís vos, te llegó a La Bomba. La percusión la hice yo con Evlay por esto mismo, desde lo que yo absorbí para ser lo que soy ahora. Creo que intento volcar todo el espectro de lo que soy en la música que voy haciendo y bueno, ahí aparece por ejemplo también la percusión, de alguna manera está presente y de pronto se plasma y aparece. Eso no es algo que esté pensando, no es que digo «ah, yo voy a hacer esto por mis raíces, por mi viejo. Entonces tengo que meter percusión acá». No, simplemente yo viví todo eso y absorbí todo eso, en un momento cae esa data y aparece, y está ¿no? y así un poco con todo.
Arte conceptual de Wos
Las ilustraciones de «Tres puntos suspensivos» ¿se mantiene el mismo concepto en este proyecto?
Sí, son de artistas distintos. En «Tres puntos suspensivos» las hizo Antonio Ramírez, que conozco desde los ocho años, así que sus dibujos siempre me representaron mucho. Su arte es increíble y en general él está también metido en esa parte, no más allá después en este último disco. Las ilustraciones son del italiano, que se llama Mirko Conte, pero también bajo la visión de él y de otra parte del equipo. Siempre está muy presente esa visión también, siempre me interesó ampliar también desde el dibujo y desde la ilustración. Así que yo creo que van a seguir apareciendo a lo largo del proyecto cosas relacionadas con eso.
Las ilustraciones complementan un poco la narrativa del disco
Son como otras perspectivas, te muestra un poco más de un universo. Creo que eso, que está bueno dar algo y también dejar toda una parte para que el espectador interprete y lo haga propio, me parece también lo más interesante y no dejar todo explicado, todo literal, sino que haya algo que también en la obra pueda completar el espectador con su visión, con su mirada y con lo que entiende lo que nosotros le damos.
Recuerda que Wos se presentará en el Movistar Arena de nuestro país este próximo 16 de agosto. Consigue tus entradas en el sistema de Puntoticket.
