Escrito por Teresa Leiva
Fotos por Isidora Blanco
El lunes se salió de la rutina para los fanáticos que llegaron al Movistar Arena por Fiebre de Cumbia, con el fin de escuchar lo mejor de la cumbia nacional y del país vecino. Néstor en Bloque, Los Sultanes, Supermerk2, Los Auntenticos Decadentes y Amar Azul cruzaron la cordillera para demostrar que no importa si hablamos de joda, pachanga, rumba o carrete, porque si hay algo que todos los cumbieros entienden, y que los une en sus diferencias, es el significado de pasarlo bien.
Desde temprano, los cumbieros se reunieron en el Parque O’Higgins a la espera de las ocho bandas invitadas a celebrar el cumpleaños de Fiebre de Cumbia en su primera versión 360. La invitación era para las seis de la tarde y muy puntualmente, Hechizo fue el encargado de abrir. Representando a la cuarta región y luego de superar su récord de streams con 59 millones de reproducciones en su última canción, la banda instaló el ambiente fiestero que el evento prometía. ¿Alguna vez han tenido un amor prohibido? Preguntó el vocalista Mario Aracena, antes de adentrarse en “Romance Ilegal”. Al terminar la canción, ya nadie estaba sentado.
Los maipucinos de La Combo Tortuga fueron los segundos en presentar su propuesta. Manuel Caro, en la voz, se disculpó por un par de problemas técnicos que no permitieron a los fans escuchar las primeras canciones “como corresponde”. Sin embargo, la banda no tuvo problema en partir de nuevo. Bailaron y rieron en el escenario irradiado el siguiente hecho: no se puede ser cumbiero si no te apasiona la vida y el carrete.
En tercer lugar, Néstor en el Bloque, con un órgano cruzado como guitarra, prendió el ambiente acompañado de efectos de fuego en el escenario. El argentino convirtió “Piel de Ángel” de Camilo Sesto en un baile inevitable. “El que no salta se pone la gorra” repetía mientras el público remecía el piso.
Le siguió La Sonora 5 Estrellas con la impresionante energía de Victor “Vitoko” Contreras. Ellos comprendieron que la promesa era una experiencia 360 y los músicos se desplazaron dando vuelta el escenario. Se podría pensar que, al ser la mitad del show, los cumbieros se habrían cansado, aunque sea un poco. Quedó claro que no era el caso cuando la banda tocó “Supermanoneao”, canción que los fans no demoraron en dedicarse entre ellos.
Los Sultanes trajeron de vuelta el carisma argentino y esta vez, ofreciendo un espectáculo teatral que rozó el striptease. Se lucieron con outfits circenses, coloridos e innovadores. De boca en boca, los músicos entregaron pan a la primera línea, “¿Quién tiene hambre?”, preguntaron antes.
Se despidieron besando la bandera y comenzó Supermerk2. El rugido del público al escuchar “Que calor” evidenció lo arraigada que está la cumbia en la cultura chilena. En la pantalla se mostraron partes de teleseries y videos musicales que la audiencia pudo reconocer inmediantente mientras coreaba las letras.
Los más esperados de la jornada fueron Los Auténticos Decadentes y Amar Azul. Llegaron en masa nuevas personas para escuchar a los intérpretes argentinos. Los auténticos tocaron sus grandes clásicos como “Loco”, “No me importa el dinero” y “La guitarra”. Le aportaron al evento una pizca de rock que nunca sobra.
“Yo me enamoré” de Amar Azul fue el inicio del fin. El grupo tuvo a su gente bailando a punta de grandes éxitos hasta pasadas las 2:30 am, cerrando así Fiebre de Cumbia. Una fiesta que los asistentes no podrán olvidar.
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