No es pertinente hablar sobre cualquier banda de metal nacional sin al menos señalar algo del contexto que rodea al proyecto. ¿Por qué? Las razones exceden las típicas meras señalizaciones de bandas supuestamente superiores o inferiores, en realidad tiene que ver con las distintas modas y denominadores comunes que han cooptado la escena. En un contexto así, pocas bandas salen tan beneficiadas de cualquier análisis como lo hace Cianuro.
Cianuro, banda oriunda de Concepción, publicó su primer larga duración, Crimen Legal, el 2016, en un contexto de alta competencia en el metal chileno. En ese entonces había más actividad en bandas que podríamos considerar pares musicales de los penquistas, como Conflicted, Dekapited o los más veteranos Matahero. Además, era una época de varias bandas de múltiples géneros operando de forma muy activa y competitiva (aún no llegaba la ola de los one-man-projects tan de moda hoy). Era un contexto que hoy está un poco diluido, si es que no derechamente transformado en otro sistema.
La propuesta de Cianuro partió cimentada en los principios del Thrash Metal. Una forma agresiva clásica pero conservando esos cuidados pertinentes para construir canciones más o menos lo suficientemente intrincadas para pasar por encima de la línea del estándar del género. Habían cosas que si llamaban la atención, partiendo por lo más obvio: las letras. Tampoco era una novedad absoluta que una banda de metal nacional adoptara una postura progresista y contestataria en su esfera lírica, solo que ese desprolijo aplicado en la fórmula de Cianuro le daba un toque especialmente agresivo y fascinante a la propuesta de la banda.
A medida que la banda ha avanzado, se han inclinado hacia un sonido más cercano al Crossover, eventualmente transformándose en una banda hecha y derecha de dicho género. Fue una forma de cerrar el círculo, pues es un estilo que les queda más con sus letras tan punzante y descarnadas en cuanto a lo político. Sin fábulas ni volteretas, es un metal que inevitable pega en la cara con la suma de sus partes.
La fórmula de Cianuro incluye darle una vuelta al metal para aproximarse a su destilado más puro. Y es que en el contexto de la brutalidad más épica y decididamente perseguida por las bandas nacionales, una aproximación de este estilo no puede sentirse de otra forma que “real”. Es lo que hace a Cianuro una banda tan especial y cuya escucha se hace verdaderamente significante para cualquiera que se aproxime.
De nuevo, en un país que por supuesto que ha tenido grandes expresiones de metal, que una de las bandas que se ha asomado a un mayor nivel de exposición mediática sea, precisamente, una tan salvaje e intensa habla bien no solo de las audiencias, sino también del trabajo de Cianuro por posicionarse con su estética genuinamente “metalera”.
Este fin de semana, Cianuro se presentará por segunda vez en el multitudinario festival gratuito Rock En Conce, a las 14:00 horas en el escenario Vans.
