Disco de la semana
Un buen tiempo pasó desde que apareció el EP debut de Estoy Bien, estrenado en medio de la incertidumbre provocada por la pandemia en pleno año 2020. En ese sentido, Lo que intentamos hacer fue un buen precedente para una banda que jamás dejó de expandir su sonido. Tal fue el caso un año después con ese recordado split cuando conocieron Confío en tus amigos, así como los numerosos sencillos (algunos dobles) que contribuyeron al enorme hype que recaía en su futuro y anunciado y ahora estrenado LP debut: Apoyo Emocional.
Tiempo suficiente para reposar la propuesta florecida en su primer larga duración. Pero más importante aún, afianzar el carácter ecléctico con el que este power trio construye y habita cada una de las 15 canciones de emo-pop que más allá de lo cliché que pueda sonar, se sienten como un gran Apoyo Emocional.
Manos que no se sueltan
Título acertado para referirse al espíritu mismo que nutre este recorrido emocionalmente catártico, presentado por una banda que pareciera llevar décadas en esto. O por lo menos varios trabajos de esta envergadura en el cuerpo, ya que el disco se siente inmenso en todo momento, gracias a la amplitud con la que retrata temáticas líricas y sonoras trabajadas a fondo, sin perder el hilo.
Al contrario, los temas suceden unos tras otros en Apoyo Emocional, cargando con el peso del desahogo, ciertas culpas y ausencias de vida pre y post adolescente. De esta forma, Estoy Bien congenia momentos filosos e intensos con otros más melódicos, en medio de una mirada liberadora y reflexiva de memorias autobiográficos, donde el sonido del emo-pop se muestra refrescante en sus planteamientos.
Debido al versátil desplante con el que se posiciona el trío adquiriendo una identidad en constante mutación, pues son muchas las heridas y huellas con las que cargan estas trizadas canciones colapsadas por un sentir rabioso como frágil. Aunque a toda costa sobrevivientes al cataclismo mismo que significa la vida en determinados momentos, y es ahí donde Apoyo Emocional adquiere mayor sentido. Después de todo este viaje se mantiene unido como si fueran manos que no se sueltan.
Un Gran Apoyo Emocional por Estoy Bien
Esta unión no solo ocurre entre sus 15 canciones, sino que también dentro de estas mismas. No por nada los cambios de perspectivas que hay en las aproximaciones a las canciones (sin contar posibles contrastes de géneros musicales) son una tónica, aunque nunca se sienten determinantes por sí solas, ya que su expresión lírica se abre camino sin mediar las consecuencias de esto.
Una pieza como «El sueño de todos» representa con creces esa fibra melancólica que transcurre durante Apoyo Emocional, a la par con «La Culpa» que ofrece una cara mucho más iracunda pero sensible, contenida desde una mirada más accesible en «Una vez más». Cada una de estas confiere esa cualidad cambiante de sus canciones, en plena armonía con el contexto, sus propias exploraciones y necesidades de expresar, así como el lugar que ocupan dentro del recorrido.
Aunque de todas, «Mis Manos» respira incluso más allá, conteniendo ciertos aires de midwest emo que junto a «Vuelves» cultivan de modo paisajista el corazón que pone Estoy Bien en este trabajo. Sin perder de vista el tono frenético de «Lo difícil se hizo largo», la fiebre épica de cuantitativas proporciones de «Piedra» junto a Tam Rivas (Chances), o la excelente llave homónima que crean para cerrar tan valioso registro.
Eufórico, rabioso y sensible
No es la única colaboración tejida en Apoyo Emocional, pues «El sonido de las campanas» con Simón Campusano (Niños del Cerro) construye de manera recreativa y en tu cara otra tremenda parada un poco antes de la mitad del disco, siendo esta primera parte marcada por ciertas sutilezas que infieren lo que vendría más adelante. Con «Las Ciudades» ubicada más al principio, marcando desde ya mayor apertura al ser más reposada.
En épocas de gran predominio mediático del videoclip, «Piel» o «Ahora» serían perfectos señuelos para acercarse a Apoyo Emocional. Melódicas, gancheras y emotivas, tal como Estoy Bien existirá en este tratado enérgico y sensible de emo-pop, con aires melódicos de pop punk y carácter post-harcore.
Por Felipe León
«Creemos que hay muchas sorpresas en el disco. Nos dimos el gusto de hacer un LP extenso en el que pudimos plasmar muchas de nuestras influencias musicales: el espectro del emo, pasando por el pop punk, hasta el post hardcore. Al escuchar la placa de forma íntegra, podrán darse cuenta de la transición de canciones amigables al oído a canciones más oscuras, tanto en lo instrumental como en lo lírico», cuentan.
Escucha Apoyo Emocional
Por Estoy Bien
Instagram
Ovoide/Sello Casata/Joyboy Records
Prensa por Ovoide
Producción Musical por Carlos Doerr y Estoy Bien
Producción Ejecutiva por Sebastián Silva y Estoy Bien
Grabación por Carlos Doerr y Daniel Ruiz en Estudios del Sur y Carlos Doerr en Estudios Sultán
Mezclas por Carlos Doerr
Masters por Francisco Holzmann
Portada por Ben Myers
Fotos promocionales por Paula Yáñez
Sellos: Casata y Joyboy Records
