Dark Angel en Chile: No hay cambio que detenga el legado

Escrito por Francisco Norambuena
Fotos por Diego Gamboa

A las 19:20 horas, las puertas del Teatro Cariola se abrieron no solo para dar paso al recinto, sino también para liberar un auténtico infierno que nos envolvió durante la inolvidable noche del pasado 30 de noviembre. Este fue el escenario del esperado regreso de una banda que ha tejido historias y experimentado cambios significativos a lo largo del tiempo, pero que sigue siendo un referente ineludible para muchos amantes del thrash metal: Dark Angel.

El grupo ofreció un vibrante homenaje a la vieja escuela del género al interpretar uno de sus álbumes más emblemáticos y fundamentales, Darkness Descends. Además, la velada brindo tributo al difunto Jim Durkin, añadiendo emotividad y respeto a la intensidad del espectáculo.

Camino al infierno

La recepción al ingresar al recinto fue simplemente fenomenal. Distraught nos dio la bienvenida con un setlist cargado de velocidad y crudeza, evidenciando un desplante en el escenario realmente impresionante, como si estuvieran jugando en el que eran expertos. Los cinco integrantes mostraron una entrega inigualable para abrir el show con ”violence in my city” “majestic twelve”.

Durante su actuación, sosteniendo una bandera de la revuelta social, Distraught expresó su total apoyo a la lucha, destacando con su interpretación de «Protesto», una canción que elevó los puños de varios fanáticos y nos hizo reflexionar.

Cuarenta minutos después, llegó el turno de Nuclear, una fuerza de potencia y brutalidad incomparable. Abriendo con «Confront» y «Dolo», Nuclear desató el primer mosh pit de la noche, el cual no cesaría a lo largo de su actuación.

La banda destacó la importancia de tocar esa noche, considerándolo un cierre para una serie de conciertos enmarcados en el lanzamiento de su último álbum. Así, por un momento, parecía que todos olvidábamos a quién veníamos a ver esa noche, ya que Nuclear se apoderó completamente del protagonismo,con un setlist de 11 canciones que definitivamente conquisto nuestras mentes.

Se abre el infierno de Dark Angel

No obstante, llegó el momento de poner fin a este imprescindible precalentamiento. La noche nos exigiría lo máximo, ya que alrededor de las 22:00 horas, Dark Angel tomaría el escenario para dar inicio a lo que se convertiría en una batalla constante de entrega de energía entre el público y la banda.

Con un moshpit que ocupaba la mitad de la sala, zapatillas volando y una bengala que iluminaba todo el recinto, resonaron los acordes de «We Have Arrived», «Time Does Not Heal» y «Never to Rise Again». La euforia ya se había apoderado de todos, y no pasó mucho tiempo antes de que la primera bandera de Chile con el nombre de la banda adornara el escenario, marcando el inicio de una serie de homenajes. Y no sería la única, ya que incluso una bandera del equipo «Colo-Colo» encontró su lugar en el escenario, sumándose a la diversidad de emociones y pasiones que se vivían en ese momento.

Dark Angel: Leyendas del Thrash

La conexión palpable entre la banda y el público se hizo evidente a lo largo del espectáculo. Ron Rinehart, el carismático vocalista de la banda, se tomó el tiempo de saludar a cada uno de los asistentes, como si quisiera reciprocidad el cariño que le estaban brindando. Mientras interpretaba himnos inmortales como «Darkness Descends», «The Burning of Sodom» y «Black Prophecies», la proximidad emocional entre la banda y la audiencia creció, creando un ambiente de comunión musical que elevó la experiencia a niveles inolvidables.

Da gusto encontrarse con bandas tan comprometidas con su público como Dark Angel, evidenciado desde la promesa de regresar en el pasado Metal Fest, superó todas las expectativas. El espectáculo específico de la banda fue más que merecido. No solo entregaron un show, sino una experiencia en la que la conexión genuina entre la banda y sus seguidores se hizo sentir en cada acorde. Definitivamente renovamos un pacto de lealtad entre una banda legendaria y su público.

Setlist Dark Angel: