Por Nicolás Rosales M.
Si hablamos de bandas icónicas del Rock Alternativo de España, es imposible omitir a Vetusta Morla. Con más de dos décadas de trayectoria, la banda suma una gran lista de hitos a los que recientemente se sumó su show realizado en el Estadio Metropolitano de Madrid ante 35.000 espectadores, el cual quedó registrado en su disco en vivo «Bailando hasta el apagón», lanzado a finales de 2022.
Tras recorrer parte de España, Vetusta Morla regresará a nuestro país, luego de su visita en marzo de 2018, cuando presentaron su disco “Mismo Sitio, Distinto Lugar”. Los intérpretes de reconocidas canciones como “Copenhague” y “Maldita dulzura”, llegan esta vez bajo el contexto de su gira por Latinoamérica, con la que presentarán su disco «Cable a tierra», merecedor de varias nominaciones al GRAMMY Latino.
Desde España, Álvaro Baglietto, bajista de la agrupación, conversó con Expectador.cl y adelantó parte de lo que será su concierto agendado para el 1 de octubre en Teatro Coliseo, además de hacer un repaso por la actualidad de la banda.
El reencuentro con Latinoamérica
Ya han pasado varias veces por distintos países de Latinoamérica, donde se concentra una buena cantidad de su público, y ahora regresan presentando parte de su nuevo material. ¿Cómo definiría a sus fanáticos de este lado del mundo?
Latinos, hermanos… Se habla mucho de los públicos por países. Aquí también. En España de repente vamos a tocar a Barcelona o a Málaga y dicen “No, es que el público de aquí es muy parado”. Yo realmente nunca creo mucho en esto. Lo que sí, si tengo que hablar de todo Latinoamérica, lo que noto es que tienen un cariño más cercano. En Europa somos más fríos, entonces a la hora de cantar canciones, de saltar o de estar con la banda, eso lo noto bastante similar, pero a la hora de hablar con nosotros en Europa es como más frío. Digamos que aquí no te encuentras cosas locas en plan gritos de “te amo” y tal, pero por lo demás yo creo que nos conectamos a un a un nivel emocional. Nos une eso, más que un origen, una forma de ser un público. Desde luego que nuestro público en América no es mayoritario como en España, o sea, en España somos una banda que tocamos en grandes recintos, y en América no es así. Entonces en América somos como algo más especial igual en ese sentido. Y el público que nos sigue, pues tiene mérito, porque se ha tenido que trabajar bien el seguirnos, no es fácil. No vamos tanto y el público de América en general ha hecho un esfuerzo por estar cerca de nuestra historia, eso también es una es una diferencia. Bueno, igual podríamos estar hablando un buen rato de los públicos jajaja.
En Chile ya se han presentado un par de veces antes. De hecho, en su visita más reciente también llegaron presentando un nuevo disco, que en esos años era Mismo Sitio, Distinto Lugar. Pero ahora, más allá del contexto de su último disco ¿Qué podemos esperar de este nuevo show a diferencia del que dieron en su visita anterior el año 2018?
Más allá del contexto del disco, pues poco, porque todo gira en torno a los discos jajaja. En aquella época estábamos presentando “Mismo Sitio, Distinto Lugar” y ahora estamos presentando “Cable a Tierra». Todo gira en torno a los discos en nuestra carrera, nosotros hacemos presentaciones de discos, ¿no?. Lo que sí te puedo decir es que, más allá de eso, la banda evoluciona. Tenemos ahora otro espíritu, somos gente cambiante, nos gusta el cambio y creemos que el cambio es muy bonito, entonces somos otra banda diferente a la que ya fue. Ahora estamos en muy buen momento, la verdad, tenemos mucha complicidad entre nosotros. El escenario para nosotros ya es como el salón de casa, estamos a gusto, no hay tensiones y no hay cosas raras. Estamos queriendo gozarlo. Somos conscientes de la suerte que tenemos de estar ahí y tenemos ya esa trayectoria como para poder decir “hostia, ahora ya lo quiero disfrutar al tope. Voy a ser consciente de la suerte que tengo de estar aquí en el Coliseo de Santiago de Chile y ya está, lo voy a disfrutar”, y eso es muy bonito. Llegar a esa madurez es maravilloso. Ese es el ideal.
La actualidad de su sonido
Han recorrido varios países en sus ya varios años de trayectoria, y su sonido se ha diversificado con el paso de los años e incluso se puede decir que en su última entrega hay tintes de sonidos latinos. ¿Sienten que el recorrer el mundo con su música los ha nutrido de elementos sonoros propios de otras culturas?
Si, si, si, mucho. Date cuenta que el artista es como un fotógrafo de sus entornos. Siempre cuando se estudia la historia del arte, tiene que ver con la historia, en el sentido que va de la mano, ¿no?. No hay acontecimientos sociales o culturales que estén tan separados, o sea, somos una réplica de lo que sentimos. Si tú viajas por América Latina como artista vas a replicar todo lo que has experimentado. Los artistas no somos independientes a lo que nos sucede y por supuesto que América, adonde llevamos viajando 15 años, nos ha dado tantas aventuras y experiencias, desde cosas muy, muy bonitas, que no vas a olvidar nunca; hasta momentos duros de cansancio. Y hemos tenido la música latina siempre a nuestro lado, lo tenemos mucho en el ADN, y eso se ha notado en el último disco.
En el mismo sentido, ¿Crees que con su último disco han llegado a una forma definitiva de su sonido?
No jajaja, para nada, para nada. De hecho, lo próximo que vamos a sacar va a ser una locura, que no tiene nada que ver, porque no queremos tener ningún tipo de parámetro o de medida, simplemente lo que se escupe, por lo que decía antes. Tiene que ver con el contexto que nos rodea, social, político, etc. Por supuesto que también afectan las vivencias propias, no tiene que ser todo común. Pero sí, este nuevo disco que ya estamos trabajando, es una continuación de “Cable a Tierra”, que no puede irse más lejos jajaja. Y por eso hace sentido que sea una continuación de “Cable a Tierra”, porque el sentido muchas veces se le da después. Después de ver la obra lo analizas y dices “wow”, y entiendes “Esto lo he hecho porque venía de aquí”, y te entiendes muchas veces después, al hablar de las obras. Y no, nuestro sonido no se va a quedar en “Cable a tierra”, para nada.
Siguiendo el mismo hilo, siempre se les clasifica en el estilo indie-rock o rock alternativo, pero su música últimamente se ha ampliado a otras áreas. ¿Cómo definirías el sonido actual del proyecto?
La música es muy difícil de definir, ¿no?. Es como ¿cómo definirías una canción?, ¿cómo definirías un cuadro?. Pues sí, se puede intentar. Yo siempre he dicho que somos una banda de rock, porque creo que tenemos esa energía. Creo que es una cuestión de energía. Las notas que utiliza el pop y que utiliza el rock son las mismas. Nunca me ha gustado mucho definir, la verdad me gusta más decir “Es más fácil, ponte un disco y ya está, ya te estoy dando todas las definiciones en 40 minutos de escucha”.
Presentaron hace poco un disco en formato en vivo. Claramente, como sucede con muchas bandas, su sonido aviva otras sensaciones ¿Cómo definirías en tus palabras el sonido del proyecto en vivo?
Ahora mismo en vivo tenemos un sonido muy contundente. Somos seis músicos que utilizamos desde sintetizadores hasta programaciones, batería, bajo y guitarras con miles de efectos. Tenemos una complejidad de canales, que cuando hacemos un show, pues los técnicos no sé si tienen claro cuántos canales son, pero son más de 100 canales, o sea, son es una locura. Entonces pasan muchas cosas, porque tenemos una gran variedad de canciones diferentes, en las que en unas canciones se requieren unas cosas y, en otras, otras que no tienen nada que ver, porque tenemos una trayectoria muy diferente entre discos, tal como hablábamos antes. Hablando ya más en plan genérico, diría que un concierto de Vetusta Morla es como un ritual sonoro de rock, imágenes y magia. Imágenes y magia porque nosotros al tocar y al cantar evocamos imágenes, como si estuviéramos hablando de cine. Y luego digo magia porque es lo bonito de los rituales, que si no sucede la magia, difícilmente el público se va a emocionar, pero cuando sucede, que es prácticamente siempre, es algo mágico. Es muy bonito vivirlo, y el público que lo ha vivido con nosotros me está entendiendo ahora, ellos saben de lo que hablo.
Ya para cerrar, ¿Qué le dirían a alguien que aún no sabe si asistir o no a su concierto anunciado en Chile?
Jajajaja, a mí no me gusta nada vender motos. A ver, si fuera alguien que quiero le diría “Mira, este grupo va muy poco a Chile. Este grupo ha hecho historia ya en la música. Este grupo tiene el mejor directo, o posiblemente, si no estás de acuerdo con que sea el mejor, posiblemente estés de acuerdo con que sea uno de los mejores directos”, eso se lo diría si fuera amigo. Si no fuera amigos le diría “Oye, mira, si no vas, te vas a perder esto”. Hay veces que vivimos perdiéndonos cosas constantemente. No podemos estar todo el rato viéndolo todo, ¿no?. Ayer, sin ir más lejos, tocaba en Madrid Bjork, no fui a verla y no me importó. Bueno, no podemos estar a todas. Hay mucha gente en Latinoamérica que no viene a vernos. Entiendo que conocen que es un grupo que sí, que está muy bien, que hablan muy bien de ellos, pero ¿Qué pasa si no voy y me lo pierdo?, pues no pasa nada. Quiero decir, nosotros tenemos ya un pequeño público allá, y lo que si sentimos es que la gente que va a vernos, realmente son personas que han entendido la primera parte de lo que te he dicho. Lo han entendido y nos lo hacen saber, y eso es muy bonito. Es una reflexión chula, la verdad qué de cosas hay que nos perdemos.
Vetusta Morla se presentará en Teatro Coliseo, Santiago, el 1 de octubre.
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